Ernesto Barajas, líder y voz de la popular banda de música regional mexicana Enigma Norteño, fue un artista que vivió intensamente entre la fama y el peligro.

Su vida, marcada por el éxito y la tragedia, culminó en un evento que dejó una profunda huella en el mundo de la música y en la comunidad que lo seguía.

Ernesto Barajas dead: Enigma Norteño founder reportedly murdered in Mexico  - Hindustan Times
El 19 de agosto de 2025, Ernesto fue encontrado sin vida en un taller mecánico en Zapopan, Jalisco, un final inesperado para un hombre que había transformado su pasión por la música en un fenómeno cultural.

 

Ernesto Barajas nació en Sinaloa, un estado conocido por su rica tradición musical y su conexión con el narcotráfico.

Desde joven, mostró un interés profundo por la música, entendiendo que no solo era un medio de expresión, sino también una poderosa narrativa.

A los 18 años, fundó Enigma Norteño, una banda que rápidamente ganó popularidad gracias a su estilo único y letras crudas que reflejaban la realidad del norte de México.

 

Con canciones que hablaban de la vida en las calles, traiciones y el poder del crimen organizado, Enigma Norteño se convirtió en la voz de una generación que buscaba identificarse con sus experiencias.

Temas como “El Ondeado” y “Los Lujos del R” no solo alcanzaron millones de reproducciones, sino que también alimentaron una mitología moderna en torno al narcocorrido, un subgénero que retrata sin filtros la vida de los capos y sus entornos.

 

A medida que la música regional mexicana evolucionaba, Ernesto se destacó por su capacidad de conectar con su público.

Su voz grave y su presencia imponente lo convirtieron en un narrador de historias que resonaban profundamente en quienes las escuchaban.

Mexican Singer Ernesto Barajas, Founder Of Enigma Norteño, Shot Dead In  Guadalajara: Reports
Sin embargo, su éxito también atrajo la atención de poderes oscuros.

A medida que la violencia entre cárteles aumentaba en México, las letras de sus canciones comenzaron a tener repercusiones en la vida real.

 

En 2023, Ernesto recibió un narcomensaje del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), advirtiéndole que debía cancelar sus presentaciones.

Este mensaje fue un claro indicio de que su vida estaba en peligro. Aunque decidió suspender algunas presentaciones, no se escondió.

En entrevistas, habló abiertamente sobre las amenazas y el precio de escribir narcocorridos, afirmando que sabía lo que hacía y que no tenía intención de callar.

 

En un intento por explorar más a fondo su relación con la música y la cultura, Ernesto lanzó el podcast “Puntos de Vista”.

Este espacio se convirtió en un foro donde entrevistaba a otros artistas del género, compartiendo sus experiencias y reflexionando sobre la vida en el mundo del narcocorrido.

Sin embargo, a medida que su popularidad crecía, también lo hacía el riesgo que enfrentaba.

 

En uno de los episodios de su podcast, Ernesto habló sobre el miedo que sentía y cómo había tenido que cancelar conciertos debido a advertencias.

Ernesto Barajas, de Enigma Norteño, presentía su final: “vivan como si  fuera el último día”, publicó
Aunque mantenía una fachada de valentía, era evidente que la sombra del peligro lo seguía de cerca.

Su autenticidad y cercanía con los fans lo convirtieron en un líder dentro de la comunidad, pero también lo hicieron un blanco atractivo para aquellos que querían silenciar su voz.

 

El 19 de agosto de 2025, mientras acompañaba a un amigo a recoger un vehículo en un taller mecánico, Ernesto fue atacado.

Los agresores llegaron en motocicleta y dispararon múltiples veces, dejando su cuerpo sin vida.

La noticia de su muerte conmocionó a sus seguidores y a la comunidad musical, que rápidamente se unió en luto por la pérdida de un artista valiente.

 

Las circunstancias de su muerte apuntaron a un ajuste de cuentas, un mensaje claro de que hablar sobre ciertos temas en México puede tener consecuencias mortales.

Las autoridades abrieron una investigación, pero la verdad detrás de su asesinato quedó envuelta en un manto de misterio y especulación.

Algunos rumores indicaban que Ernesto había grabado un episodio inédito de su podcast donde iba a revelar tensiones internas entre artistas y figuras del crimen organizado, pero nunca llegó a publicarlo.

Asesinan a Ernesto Barajas, vocalista de la banda sinaloense "Enigma  Norteño", en Jalisco - UnoTV

La muerte de Ernesto Barajas no solo marcó el fin de una carrera brillante, sino que también dejó un vacío en el mundo de la música regional mexicana.

Su legado perdura en cada canción, en cada letra que escribió y en cada historia que contó.

A través de su música, Ernesto se convirtió en un símbolo de la lucha entre el arte y el peligro, un recordatorio de que la verdad puede ser una arma de doble filo.

 

Su funeral en Culiacán fue un momento desgarrador, donde su familia y amigos se reunieron para rendir homenaje a un hombre que había dedicado su vida a contar historias.

Su esposa, Alexis, y sus hijos pequeños enfrentaron la dura realidad de perder a un padre y esposo, mientras el morbo y los rumores rodeaban su muerte.

 

La historia de Ernesto Barajas es un espejo de la complejidad del mundo en el que vivimos.

En un país donde la violencia y la música a menudo se entrelazan, su legado invita a la reflexión sobre la responsabilidad del artista.

¿Es el músico responsable de las implicaciones de su mensaje? ¿Tiene derecho a contar lo que otros callan, incluso si eso pone en peligro su vida? Ernesto eligió ser auténtico, y esa decisión le costó caro.

Ernesto Barajas, narcocorrido icon, victim of fatal ambush in Zapopan
Su voz sigue resonando en cada rincón de México, en cada fiesta donde su música se escucha, y en cada corazón que se identifica con sus letras.

Su historia es un recordatorio de que, aunque la vida de un artista puede ser gloriosa, también está llena de riesgos y sacrificios.

 

Hoy, al escuchar sus canciones, sentimos no solo el ritmo y la energía, sino también la tristeza de una vida interrumpida.

La voz de Ernesto Barajas no se apagará fácilmente; su legado perdurará en la memoria colectiva de aquellos que valoran la verdad, la autenticidad y el poder de la música para contar historias que, a menudo, son demasiado reales.

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