La noche del 5 de abril de 2025 quedará grabada en la memoria de muchos.

 

 

Jessica Bueno y Jota Peleteiro protagonizaron un enfrentamiento cara a cara en el plató de “Viernes con Santi Acosta” que dejó al público boquiabierto.

 

Las imágenes fueron tan explosivas que no tardaron en hacerse virales en redes sociales.

 

Jessica no se contuvo ni un segundo.

 

Desde el primer minuto, arremetió contra Jota con frases durísimas.

 

“¡No utilices a mi hijo para limpiar tu imagen!”, le gritó con firmeza.

 

Cabe destacar que Jessica se refería al hijo que tiene con Kiko Rivera, no con Peleteiro.

 

 

El tono de la conversación fue elevándose progresivamente, alcanzando momentos de verdadera tensión.

 

Jessica acusó a Jota de manipular la narrativa y evitar asumir responsabilidades.

 

Aseguró que él sabe cómo desviar las preguntas para evitar enfrentar lo que realmente ha hecho mal.

 

Peleteiro, visiblemente incómodo en varios momentos, no supo cómo responder a las acusaciones.

 

Tartamudeos, evasivas y generalidades marcaron sus intervenciones.

 

Jessica insistió en que todo se resolverá en los juzgados, donde asegura tener pruebas contundentes.

 

“Quiero que el juez decida, y yo acataré lo que él diga a rajatabla”, expresó con seguridad.

 

Además, volvió a recalcar que no permitirá que se use la imagen de su hijo para lavar errores ajenos.

 

El conflicto viene de lejos, pero este cara a cara marcó un antes y un después.

 

Jessica declaró que solo dio la primera entrevista por desesperación y necesidad económica.

 

 

Con ese dinero, pagó el colegio de sus hijos, algo que considera su máxima prioridad.

 

“No estabas cumpliendo como padre”, dijo, mirando directamente a Jota.

 

Aunque aclaró que nunca dijo que él fuera mal padre, sí dejó entrever su decepción por la falta de responsabilidad.

 

También mencionó las transferencias bancarias que él supuestamente no ha realizado.

 

Jessica asegura que los datos del banco pueden demostrar su versión.

 

Por su parte, Jota intentó mantenerse sereno y conciliador.

 

Dijo que su intención no era atacar, sino simplemente dar su punto de vista.

 

Reconoció que no es perfecto, pero afirmó que siempre ha intentado cumplir con sus obligaciones.

 

Aun así, Jessica le lanzó un dardo demoledor: “Ya no te tengo miedo”.

 

Una frase que, dicha en ese contexto, tuvo un peso enorme.

 

Jessica recalcó que todo podría haberse resuelto si él hubiese pagado los tres meses de pensión que debía.

 

 

Incluso dijo que le quitaba todo en el acuerdo legal, incluida una denuncia penal.

 

Solo pedía una muestra de confianza: que cumpliera con esos pagos atrasados.

 

Peleteiro, sin embargo, no lo hizo, lo que para Jessica fue la gota que colmó el vaso.

 

A pesar de todo, ambos se mostraron abiertos a sentarse frente a frente con abogados presentes.

 

Aunque Jessica, claramente, ya no confía en él.

 

El público quedó dividido.

 

Algunos apoyan a Jessica por su valentía al enfrentar públicamente la situación.

 

Otros creen que ambos deberían haber mantenido este conflicto fuera de las cámaras.

 

El presentador, Santi Acosta, intentó mediar, pero quedó claro que la tensión era insostenible.

 

El tema central, sin embargo, sigue siendo el bienestar de los hijos.

 

 

Ambos coinciden en que el futuro debe girar en torno a ellos.

 

Pero las heridas del pasado parecen demasiado profundas para sanar con palabras.

 

Este enfrentamiento televisado no solo reveló verdades incómodas.

 

También dejó al descubierto la fragilidad emocional de ambas partes.

 

Y planteó una gran incógnita: ¿Podrán algún día llegar a un acuerdo por el bien de sus hijos?

 

El juicio se acerca y será allí donde realmente se determine la verdad.

 

 

Mientras tanto, la audiencia sigue expectante.

 

¿Quién tiene razón?

 

¿Quién miente?

 

¿Y qué pasará cuando se apaguen las cámaras?

 

La historia entre Jessica Bueno y Jota Peleteiro aún no ha terminado.