En una jornada parlamentaria cargada de tensión, Cayetana Álvarez de Toledo protagonizó un enfrentamiento encendido con Félix Bolaños que dejó sin aliento a la Cámara Baja.

 

Cayetana deja a la altura del betún a Félix Bolaños a cuenta de Ábalos:  “Hacía pagar sus putas a los españoles” - Periodista Digital

 

La diputada del Partido Popular no se guardó nada y lanzó una serie de acusaciones directas que desataron la polémica entre los bloques políticos.

 

Su intervención no solo puso en evidencia las contradicciones del Gobierno, sino que también encendió de nuevo el debate sobre la legalidad

constitucional de las últimas decisiones del Ejecutivo.

 

Uno de los puntos más calientes del debate fue la amnistía a los líderes independentistas catalanes, medida que ha dividido a la sociedad

española y que Álvarez de Toledo calificó como una “traición a la Constitución”.

 

La diputada denunció que esta iniciativa representa un golpe directo al Estado de derecho y cuestionó duramente la motivación política

detrás de esta concesión.

 

“¿Es esta la forma en que el Gobierno pretende solucionar el conflicto catalán, regalando impunidad a los que intentaron romper España?”,

sentenció con tono desafiante.

 

La expareja de Ábalos admite que nunca trabajó en las empresas públicas que  la contrataron | España | EL PAÍS

 

Pero no se quedó ahí.

 

Álvarez de Toledo también puso sobre la mesa la fragilidad institucional que, según ella, atraviesa el país por culpa de las alianzas del

presidente Pedro Sánchez.

 

Acusó al jefe del Ejecutivo de entregar la gobernabilidad a partidos independentistas y radicales con tal de mantenerse en el poder, incluso si

eso significa romper con los principios constitucionales.

 

“Hoy en España no gobierna una mayoría constitucional, sino una suma de minorías que chantajean al Gobierno a cambio de impunidad”,

afirmó.

 

Félix Bolaños intentó responder con un discurso que apelaba a la estabilidad y al diálogo, pero la contundencia de Cayetana dejó una marca

profunda en la sesión.

 

Las redes sociales rápidamente se llenaron de fragmentos del discurso, que ya ha sido calificado por algunos como uno de los más

incendiarios del año.

 

Además, Álvarez de Toledo no dudó en señalar lo que considera una hipocresía política del Gobierno.

 

Recordó cómo hace unos años, el propio PSOE se oponía con vehemencia a cualquier tipo de amnistía o concesión al independentismo.

 

“Lo que ayer era inaceptable, hoy es política de Estado.

 

El rostro del bulo": Álvarez de Toledo arremete contra Bolaños en una  sesión tensa en el Congreso

 

¿Dónde está la coherencia?”, preguntó retóricamente mientras los murmullos crecían en la bancada socialista.

 

La diputada también criticó con dureza el papel del presidente Sánchez en el exterior, acusándolo de deteriorar la imagen internacional de

España por sus pactos con fuerzas que, en su opinión, no creen en la unidad nacional.

 

“La política exterior también se resiente cuando el mundo ve que España premia a quienes quieren destruirla”, lanzó.

 

El choque entre Cayetana y Bolaños no solo ha generado reacciones en el Congreso, sino que ha reavivado el debate en la opinión pública

sobre los límites del poder ejecutivo y el respeto a la Constitución.

 

La polémica intervención pone en evidencia las grietas en el tablero político nacional y la creciente crispación entre el Gobierno y la

oposición.

 

Mientras tanto, la sociedad española sigue dividida sobre el camino a seguir respecto al conflicto catalán.

 

¿Es la amnistía una solución o una rendición?

 

¿Hasta qué punto está dispuesto el Gobierno a ceder por estabilidad?

 

El “bulócrata reincidente” Félix Bolaños, triturado por Cayetana Álvarez de  Toledo tras esparcir una mentira del 11M

 

¿Y qué consecuencias tendrá esto para la credibilidad democrática de España?

 

El discurso de Cayetana Álvarez de Toledo ha dejado más preguntas que respuestas, pero una cosa está clara: la tensión política no hará más

que crecer en los próximos meses.

 

Y en medio de esta tormenta, los ciudadanos observan con escepticismo, esperando que la política vuelva a centrarse en el interés común y no

en cálculos partidistas.

 

¿Será posible reconstruir el consenso constitucional?

 

¿O nos dirigimos hacia una fragmentación aún mayor?

 

 

Lo cierto es que el debate está abierto y la batalla política apenas ha comenzado.

 

Este episodio en el Congreso pasará a la historia como un punto de inflexión, donde las palabras volvieron a ser armas poderosas en la lucha

por el futuro de España.