Marc Giró se niega a presentar las tardes de TVE junto a Belén Esteban

La polémica ha estallado en los pasillos de Televisión Española tras conocerse que Marc Giró ha rechazado categóricamente la propuesta de presentar un nuevo programa vespertino junto a Belén Esteban.

La noticia, que en un principio parecía solo un rumor más del mundo televisivo, ha sido confirmada por varias fuentes internas y ya está generando un intenso debate tanto dentro como fuera del ente público.

La situación se origina tras la cancelación de La Moderna, la serie de época que hasta hace poco ocupaba la franja de la tarde en La 1.

Con los índices de audiencia por debajo de lo esperado y una creciente presión por revitalizar las tardes, TVE buscaba una fórmula que combinara entretenimiento, actualidad y un toque de espectáculo.

En ese contexto, la cadena se planteó una jugada arriesgada pero ambiciosa: reunir en un mismo plató a Marc Giró, el carismático presentador de Late Xou en La 2, y a Belén Esteban, la estrella mediática por excelencia del universo Sálvame.

El objetivo era claro: recuperar el espíritu de Sálvame, ese formato que durante más de una década fue rey absoluto de las tardes en Mediaset.

TVE quería capturar esa chispa, pero adaptándola a los códigos del servicio público, con un tono algo más elegante, sin perder el componente popular.

Y ahí es donde la figura de Marc Giró parecía encajar como puente entre dos mundos: el del análisis agudo y la televisión de autor, y el del espectáculo más puro y provocador.

Sin embargo, Marc Giró no tardó en dar su respuesta.

Según fuentes cercanas al presentador, rechazó el proyecto con un “no” rotundo, sin lugar a negociaciones ni segundas propuestas.

El motivo: una falta total de afinidad con el estilo televisivo que representa Belén Esteban y, más aún, con la idea de replicar el modelo de Sálvame bajo el sello de TVE.

“Marc no quiere formar parte de un producto que no le representa”, afirma una persona de su entorno.

“Él ha construido un estilo propio, irónico, inteligente, con un lenguaje muy cuidado. El mundo de Sálvame le resulta completamente ajeno.”

Por su parte, Belén Esteban sí habría mostrado interés en el proyecto.

Desde su abrupta salida de Mediaset, la colaboradora ha explorado distintas vías para volver a la televisión con fuerza.

Aunque ha disfrutado del éxito de su marca de gazpachos y patatas fritas, su deseo de regresar a un plató ha sido constante.

Colaboraciones esporádicas, entrevistas y presencia en redes han mantenido viva su figura mediática, pero lo que realmente busca —según ha dicho en más de una ocasión— es un programa diario donde poder conectar con el público como antes.

La negativa de Giró ha dejado al equipo de contenidos de TVE en una situación comprometida.

El formato ya estaba en fase de diseño inicial y contaba incluso con un título provisional, que combinaba actualidad, entrevistas, entretenimiento y una mesa de colaboradores.

Ahora, sin su presentador principal, todo queda en suspenso.

En redes sociales, las reacciones no se han hecho esperar.

Algunos aplauden la decisión de Giró, considerándola coherente con su trayectoria profesional y su integridad como comunicador.

Otros, en cambio, lamentan que se haya perdido la oportunidad de ver una fusión improbable pero potencialmente explosiva.

“¿Y si hubiese funcionado?”, se preguntan algunos usuarios en X.

“¿Y si la mezcla de estilos hubiera generado un nuevo tipo de televisión, diferente a todo lo anterior?”

Mientras tanto, desde RTVE no han querido hacer declaraciones oficiales, pero fuentes internas confirman que siguen buscando una alternativa potente para sus tardes.

No se descarta que Belén Esteban continúe vinculada al proyecto con otro perfil de co-presentador o que se reformule completamente el formato.

Marc Giró, por su parte, continúa con su labor en Late Xou, un programa que ha ganado una audiencia fiel gracias a su estilo desenfadado, cultural y provocador.

En su última emisión, hizo una breve alusión —no exenta de sarcasmo— al “tipo de televisión que uno prefiere no hacer”, lo que muchos interpretaron como una referencia velada a la situación con TVE.

El debate está servido: ¿tiene sentido recuperar el modelo Sálvame en una cadena pública?

¿Debe TVE arriesgar por formatos más comerciales para competir en audiencia o mantener una línea más institucional?

¿Y qué lugar ocupan figuras como Belén Esteban en la nueva era de la televisión?

Lo cierto es que el no de Marc Giró ha dejado clara una cosa: no todos están dispuestos a sacrificar su esencia por un puñado de puntos de share.

Y en tiempos donde la autenticidad es un bien escaso en televisión, su decisión ha sido, para muchos, tan valiente como necesaria.

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