La hija de Terelu Campos ha protagonizado un tenso enfrentamiento con los periodistas a su llegada al aeropuerto de Madrid junto a Carlo Costanzia

 

 

El pasado miércoles por la tarde, el aeropuerto de Madrid-Barajas se convirtió en escenario de un tenso enfrentamiento entre Alejandra

Rubio, hija de Terelu Campos, y un grupo de periodistas que aguardaban para obtener declaraciones sobre las recientes memorias de su suegra, Mar Flores, tituladas Mar en calma.

La joven llegó acompañada de Carlo Costanzia, hijo de la actriz y fruto de su relación con el empresario Carlo Costanzia, quienes se disponían a tomar un vuelo a Barcelona tras varios compromisos profesionales en la capital.

Al bajar del vehículo, Alejandra fue abordada de inmediato por los reporteros, quienes comenzaron a preguntarle sobre los pasajes más

polémicos del libro, especialmente aquellos que hacen referencia a la relación de Mar Flores con Alessandro Lequio y los conflictos familiares con su hijo Carlo.

La joven, visiblemente molesta, respondió de manera contundente: “Sacad esto y llamadme borde”, en un tono firme y con un gesto de irritación que no dejó lugar a dudas sobre su incomodidad.

 

Mar Flores, en 'El Hormiguero'.

 

Según testigos presentes, Alejandra intentó mantener la calma mientras los periodistas insistían, haciendo alusión a los momentos más íntimos y controversiales descritos en el libro.

“No voy a entrar en comentarios sobre lo que se publica, cada uno tiene derecho a contar su versión, pero no quiero alimentar polémicas innecesarias”, afirmó mientras intentaba avanzar hacia la entrada del control de seguridad.

Carlo Costanzia, por su parte, se mantuvo al lado de Alejandra, tratando de mediar y suavizar la situación, aunque la presión mediática era evidente.

El enfrentamiento duró cerca de dos minutos, tiempo durante el cual las cámaras captaron gestos de frustración y miradas tensas.

Algunos reporteros insistieron en cuestionar si la publicación del libro había afectado la relación familiar y si Alejandra consideraba que ciertos comentarios sobre su entorno habían sido injustos o exagerados.

La respuesta de la hija de Terelu Campos no se hizo esperar: “Cada uno cuenta su verdad, yo respeto la de todos, pero no voy a opinar sobre todo lo que se publica”, declaró antes de ingresar finalmente al área de embarque.

Fuentes cercanas a la familia indicaron que la reacción de Alejandra no fue un acto improvisado, sino el resultado de semanas de tensión tras el lanzamiento de las memorias.

Mar Flores decidió relatar en el libro episodios de su vida privada, incluyendo conflictos y reconciliaciones familiares, decisiones que han generado especulación mediática y debates públicos sobre la intimidad de los personajes implicados.

Se asegura que Alejandra había intentado previamente mediar con su suegra para evitar que ciertos detalles se hicieran públicos, pero finalmente respetó la decisión de Mar de contar su versión de los hechos.

 

Primeras imágenes de Alejandra Rubio y Carlo Costanzia tras la publicación  del libro de Mar Flores

 

La llegada de Alejandra Rubio al aeropuerto coincidió además con un flujo de turistas y pasajeros, lo que aumentó la presión y la expectación de los medios.

Su acompañante, Carlo, comentó de manera escueta: “Estamos tranquilos, solo queremos viajar y cumplir con nuestros compromisos, no hay nada más que decir”.

Sin embargo, la insistencia de los periodistas provocó que la joven volviera a repetir: “Sacad esto y llamadme borde, porque estoy harta de que se tergiverse todo”.

El incidente ha generado un amplio debate en redes sociales, donde seguidores y detractores han comentado sobre la actitud de Alejandra.

Algunos aplauden su firmeza al proteger la intimidad familiar y critican a la prensa por la presión ejercida, mientras que otros consideran que su reacción pudo haber sido más diplomática, sugiriendo que una respuesta más medida habría evitado titulares sensacionalistas.

Además de lo ocurrido en el aeropuerto, expertos en comunicación y periodistas de crónica social han señalado que este tipo de reacciones no son infrecuentes cuando se tratan temas relacionados con libros de memorias que incluyen detalles familiares.

Las memorias de Mar Flores han sido ampliamente comentadas desde su publicación, debido a la naturaleza íntima de sus revelaciones y la fama de los implicados.

Entre los temas más controvertidos se encuentran las descripciones de relaciones pasadas, enfrentamientos con medios de comunicación y situaciones personales que afectan directamente a su entorno más cercano.

 

Carlo Costanzia regresa a Madrid tras viajar a Turín para apoyar a su  familia | El Norte de Castilla

 

Alejandra Rubio, conocida por su carácter directo y por mantener un perfil mediático activo, ha demostrado con este gesto que no está dispuesta a permitir que se difundan versiones que considere inexactas o que pongan en entredicho a su familia.

Fuentes cercanas señalan que la joven ha recibido apoyo tanto de familiares como de amigos, quienes reconocen la dificultad de gestionar la exposición pública y la atención constante de los medios.

Por su parte, los periodistas presentes en el aeropuerto han defendido su labor, alegando que su trabajo consiste en cubrir las noticias

relacionadas con figuras públicas y que las memorias de Mar Flores constituyen un tema de interés general, especialmente por la repercusión mediática que generan los conflictos familiares de personajes conocidos.

Sin embargo, la reacción de Alejandra deja claro que la línea entre interés público y respeto a la privacidad sigue siendo objeto de debate.

Finalmente, se espera que Alejandra y Carlo mantengan un perfil más bajo en sus próximas apariciones públicas, priorizando la privacidad y evitando nuevos conflictos con la prensa.

Mientras tanto, las memorias de Mar Flores continúan siendo comentadas, analizadas y debatidas, y la reacción de su nuera ha añadido un capítulo más a esta historia de tensiones familiares y exposición mediática que sigue captando la atención del público.