La herencia de Paquirri sigue siendo un tema de lo más comentado. Por ello, Carmina Ordóñez habló en exclusiva para la revista Lecturas en el año 1991, estallando contra la viuda del torero

 

Así estalló Carmina Ordóñez en exclusiva a la revista Lecturas: “Isabel  Pantoja solo quiere hacer daño. Creo que esta mujer tiene fijación por mí”

 

En 1991, en un contexto donde la herencia de Francisco Rivera “Paquirri” continuaba siendo motivo de controversia y atención mediática,

Carmina Ordóñez decidió romper su silencio y conceder una entrevista exclusiva a la revista Lecturas que ha quedado en la memoria pública como uno de los momentos más tensos de la prensa del corazón española.

La hija del desaparecido torero, quien siempre ha estado en el centro de los conflictos familiares y mediáticos, lanzó duras críticas contra Isabel Pantoja, la viuda de Paquirri, acusándola de mantener una actitud hostil y de buscar hacerle daño intencionadamente.

La entrevista, realizada en un ambiente de alta tensión y en plena polémica sobre la herencia que dejó Paquirri tras su muerte en 1984, se convirtió en un foco de atención nacional.

Carmina no dudó en expresar su frustración y dolor ante lo que consideraba ataques personales de Isabel, a quien definió como una mujer con “fijación” hacia ella.

Este término, utilizado con firmeza, encapsulaba una relación cargada de recelos y enfrentamientos que habían marcado la vida pública y privada de ambas figuras durante años.

 

Así estalló Carmina Ordóñez en exclusiva a la revista Lecturas: “Isabel  Pantoja solo quiere hacer daño. Creo que esta mujer tiene fijación por mí”

 

En las declaraciones que concedió a Lecturas, Carmina afirmó: “Isabel Pantoja solo quiere hacer daño. Creo que esta mujer tiene una fijación conmigo que va más allá de lo razonable”.

Esta frase, contundente y directa, abrió una ventana a los sentimientos más profundos de una mujer que se encontraba en medio de una disputa no solo económica sino también emocional y mediática.

La herencia de Paquirri, que incluía bienes materiales pero también la gestión de la memoria y legado del torero, seguía siendo un punto neurálgico de tensiones que traspasaban la esfera privada para convertirse en un espectáculo público.

Para comprender el alcance de esta polémica es importante recordar que Paquirri falleció trágicamente en la plaza de toros de Pozoblanco en 1984, dejando a su familia y seguidores conmocionados.

Su muerte precipitada generó no solo un duelo nacional sino también una disputa legal y familiar en torno a su herencia, en la que Isabel Pantoja, cantante y figura pública, tuvo un papel central al ser su viuda y madre de uno de sus hijos.

Carmina Ordóñez, por su parte, hija del torero de una relación anterior, se vio inmersa en un conflicto constante que mezclaba sentimientos personales con intereses patrimoniales.

 

Esto es lo que decía Carmina Ordóñez sobre la polémica herencia de Paquirri

 

El enfrentamiento entre ambas mujeres ha sido documentado a lo largo de los años con numerosos episodios mediáticos, pero esta entrevista de 1991 destacó por su crudeza y sinceridad.

Carmina no se limitó a expresar su descontento, sino que también dejó entrever la carga emocional que suponía convivir con una enemistad tan visible y desgastante.

En sus palabras, se refleja el peso de una rivalidad que, más allá del dinero o la fama, toca aspectos muy íntimos de identidad, justicia y reconocimiento familiar.

La entrevista en Lecturas, que fue publicada en un momento en el que la prensa del corazón española comenzaba a consolidarse como un fenómeno masivo,

contribuyó a poner en primer plano las tensiones detrás del telón de la familia Rivera y Pantoja, una de las sagas más conocidas y seguidas por el público.

El impacto de esas declaraciones siguió resonando en la opinión pública durante años y se convirtió en un punto de referencia para entender la complejidad de las relaciones entre los protagonistas.

 

Esto es lo que decía Carmina Ordóñez sobre la polémica herencia de Paquirri

 

Con el paso del tiempo, esta disputa ha ido tomando diferentes formas, con episodios de acercamiento y distanciamiento,

pero la sombra de aquella entrevista sigue presente como un testimonio de un momento crucial en la historia de dos mujeres que representan no solo un conflicto personal, sino también un choque cultural y mediático en España.

La tensión que Carmina Ordóñez destapó aquella vez fue solo el reflejo de una guerra abierta que continúa generando interés y debate entre los seguidores de la prensa rosa y la historia del mundo del toro.

Así, aquella explosiva declaración en 1991 sirve para recordar que detrás de los titulares y los escándalos hay personas con heridas profundas,

y que la historia de Paquirri y su herencia sigue siendo un tema de gran resonancia pública, marcado por enfrentamientos que traspasan generaciones y siguen alimentando la pasión y controversia en la sociedad española.

 

La guerra que nunca le ganó Carmina Ordóñez a Isabel Pantoja | Mujerhoy