Meses después, la presentadora tiene que lidiar con otro contratiempo. Un percance algo más llevadero que ella misma contaba por sus redes sociales.
Paloma Lago atraviesa uno de los veranos más complicados de su vida.
La presentadora gallega, de 57 años, ha vuelto a aparecer en redes sociales semanas después de que saliera a la luz una denuncia por una presunta agresión sexual que habría sufrido el pasado 27 de diciembre de 2024.
El señalado es Alfonso Villares, exconselleiro do Mar de la Xunta de Galicia, quien renunció a su cargo el 4 de junio de 2025 para poder defenderse ante la justicia de las graves acusaciones.
Desde entonces, Paloma se ha mantenido mayormente en silencio, evitando apariciones públicas y refugiándose en su entorno más cercano.
La denuncia fue presentada por Lago en enero de este año, ante un juzgado de Ferrol, ciudad en la que reside y donde también ocurrió el presunto ataque.
Según se ha filtrado, la presentadora sospecha que fue víctima de sumisión química, un método cada vez más utilizado en este tipo de delitos y que ha generado preocupación social en toda España.
Aunque ella no ha hecho declaraciones públicas detalladas, sí ha dejado algunas frases en su cuenta de Instagram que reflejan su estado de ánimo:
“El amor de la familia siempre es la respuesta” o “cultivando la paciencia” son algunas de las publicaciones que muchos interpretan como señales de una etapa de recuperación emocional compleja.
En medio de esta situación, el pasado fin de semana, la exmodelo ha compartido una imagen inesperada en sus stories de Instagram.
En la foto se la ve en el jardín de su casa en Ferrol, con el brazo izquierdo vendado, acompañada de su perrita Chloe, una compañera inseparable en estos meses tan difíciles.
“Gajes del oficio de jugar con mi Chloe del alma”, escribió Paloma junto a la imagen, explicando que se ha roto el radio mientras jugaba con su mascota.
El accidente, aunque menor comparado con el dolor emocional que arrastra desde hace meses, no deja de ser otro obstáculo más en este año complicado.
Según ella misma ha contado, está siendo cuidada estos días por su hijo Javier y su nuera Eugenia, a la que cariñosamente llama “Eu”.
Ambos están pasando tiempo en Ferrol para acompañarla en esta etapa de reposo y dar apoyo emocional. La familia se ha convertido en su pilar más firme, especialmente tras el revuelo mediático provocado por su denuncia.
Aunque muchos medios han intentado contactarla para obtener su versión, ella prefiere por ahora comunicarse únicamente a través de mensajes sutiles y fotografías íntimas que sugieren su necesidad de tranquilidad.
Cabe recordar que Paloma Lago fue uno de los rostros más reconocibles de la televisión española durante los años noventa y principios de los 2000. Su carrera como modelo y presentadora le permitió ganarse un lugar en la memoria colectiva del público.
Desde hace años, su vida profesional se ha desarrollado en un perfil más discreto, alejada de los focos permanentes, aunque siempre vinculada a causas sociales y apariciones puntuales en medios.
Su relación con Alfonso Villares, si es que existió en un plano personal o profesional, no ha sido confirmada por ninguna de las partes.
Lo que sí se ha hecho público es que, a raíz de la denuncia de Lago, el político decidió dimitir para poder defenderse, negando rotundamente los hechos y asegurando que demostrará su inocencia.
El caso está bajo secreto de sumario, por lo que la investigación continúa en curso y no se han dado más detalles oficiales por parte del juzgado.
Mientras tanto, Paloma se recupera físicamente del percance doméstico, pero sobre todo emocionalmente, en un proceso que parece lento pero firme.
Su decisión de permanecer en Ferrol, alejada de Madrid y del bullicio mediático, responde al deseo de priorizar su bienestar, rodeada de los suyos y de sus mascotas.
Este nuevo revés, aunque más anecdótico que trágico, pone de manifiesto la vulnerabilidad de una figura pública que ha optado por el silencio como escudo ante el dolor.
Sus seguidores le han mostrado apoyo constante en redes sociales, donde mensajes como “Fuerza, Paloma, eres una valiente” o “Siempre contigo” se repiten con frecuencia.
La presentadora, que siempre ha sido muy celosa de su intimidad, ha dado ahora un paso inesperado al mostrarse sin filtros, en casa, herida pero acompañada, y sobre todo, con una actitud resiliente que no pasa desapercibida.
A la espera de que se conozcan más avances del caso judicial, Paloma Lago sigue afrontando su verano más difícil entre el dolor, la calma forzada y una lucha interior que muchos apenas pueden imaginar. Pero sus gestos, por mínimos que parezcan, siguen hablando por ella.
News
La influencer Ana Antolín (57 años) : “Mi madre, con 81 años, tiene la piel increíble. Su secreto es aplicarse en la cara aloe vera natural de la planta que tiene en casa”
Desde su cuenta de Instagram @anantolinfifty, esta influencer de 57 años inspira a miles de mujeres a reconciliarse con su…
Ángel León, chef, se pronuncia sobre los precios del pescado: “Para conseguir un kilo de lubina de estero se necesitan tres años y medio”
El experto ha explicado los factores que influyen sobre los precios del pescado señalando también que existe mucha “desinformación” por…
La reveladora determinación de Javier Ungría en plena batalla judicial con su ex, Elena Tablada
Javier Ungría ha tomado una decisión muy importante en estos días, coincidiendo también con la batalla judicial que todavía mantiene…
Palomo Spain se sincera sobre su infancia: “He tenido una personalidad tan fuerte siempre que me ha dado igual”
El conocido diseñador ha sido el nuevo protagonista del programa presentado por Isabel Jiménez en Cuatro, donde se ha abierto…
Muere el periodista deportivo Manuel Esteban ‘Manolete’ a los 68 años
El conocido periodista y aficionado del Atlético de Madrid ha fallecido en su ciudad natal, Madrid, a una edad muy…
Luis Font, integrante de Locomía, se rompe al relatar su situación: “No he cobrado ningún royalty de nada y de la película, gané 700 euros porque si no firmaba eso, borraban mi nombre”
El artista ha explicado cómo se encuentra tras pasar varios meses viviendo en la calle. Luis Font, una…
End of content
No more pages to load