Lope regresa al palacio junto a Burdina durante una cena oficial y revela ante todos, con pruebas en mano, que el Duque de Carril y Curro fueron los responsables del atentado contra Hannah, desatando un escándalo que cambia el destino de la familia Luján.

 

Lo que está haciendo Lope en 'La Promesa' no es solo una misión, es una  locura (y mis amigas y yo no paramos de hablar de ello)

 

La serie La Promesa está a punto de vivir uno de sus capítulos más impactantes y reveladores hasta ahora. Tras varios días desaparecido y en completo silencio, Lope finalmente regresará al palacio, pero no llegará solo ni con las manos vacías.

Su ausencia había inquietado a todos, especialmente a Jana, quien temía que algo terrible le hubiera pasado, pero la verdad detrás de su ausencia es mucho más peligrosa y sorprendente de lo que cualquiera podría imaginar.

Lope ha estado infiltrado en la casa del Duque de Carril, un lugar donde el lujo y la opulencia esconden los secretos más oscuros de la alta sociedad.

Durante su estancia clandestina, Lope ha conseguido infiltrarse en los círculos íntimos del Duque, recogiendo pruebas, escuchando conversaciones comprometedoras y descubriendo la verdad detrás del atentado que casi le cuesta la vida a Hannah semanas atrás.

 

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La vuelta de Lope no será discreta. Todo lo contrario. El joven regresa decidido a que la verdad salga a la luz en el momento más inesperado: una cena oficial en el palacio, organizada por los Marqueses para estrechar lazos con sus aliados políticos.

Los salones están adornados con las mejores galas, la música envuelve la noche y las copas de vino circulan entre sonrisas tensas y miradas calculadas.

De repente, en medio de un brindis, las puertas del salón se abren con fuerza: Lope aparece junto a Burdina, la misteriosa mujer que hasta ahora había permanecido en la sombra, pero que resulta ser una pieza clave en todo el entramado.

Las conversaciones cesan de inmediato. Todos los presentes se giran al unísono. El Marqués, desconcertado, exige explicaciones. Jana se levanta de la mesa con el corazón en un puño, mientras Manuel la sujeta del brazo intentando mantener la calma.

Sin embargo, es Curro quien reacciona de manera más impulsiva: “¡No puedes estar aquí, Lope! ¿Qué has hecho?” grita, con el rostro desencajado. La tensión es palpable.

 

Lope, interpretado por Enrique Fortún, mete la pata y desvela su secreto en  La Promesa - YouTube

 

Con paso firme, Lope se adelanta al centro del salón y alza la voz: “He vuelto porque ya no hay nada que ocultar. Aquí está la prueba de quién intentó matar a Hannah. Y también de quiénes se han beneficiado de ello en este palacio.”

Burdina, a su lado, abre un pequeño cofre que contiene cartas, documentos y un anillo con el sello del Duque de Carril, prueba irrefutable de su implicación en el atentado.

La evidencia no solo confirma la autoría del Duque, sino que también desvela la colaboración de un miembro inesperado de la casa: Curro.

La revelación cae como un jarro de agua fría. Curro intenta defenderse, pero Lope no le da tregua: “Tú sabías todo desde el principio. Lo encubriste porque te prometieron un lugar a su lado, pero has puesto en peligro a todos los que decías querer.”

 

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La confesión indirecta de Curro y la mirada de culpa en sus ojos no dejan lugar a dudas. Jana, rota por la decepción, se aparta de él.

Manuel, sin decir palabra, clava su mirada en su primo como si no lo reconociera. El Marqués ordena que se investigue todo al detalle y que se tomen medidas inmediatas.

El regreso de Lope no solo sirve para descubrir a los culpables, sino que también marca un giro radical en la historia del palacio.

La presencia de Burdina, que hasta ahora se creía una simple criada de otra casa noble, revela que es en realidad una espía al servicio de intereses extranjeros que buscaban desestabilizar a la familia Luján y sus aliados.

 

 

Curro, desesperado, abandona el salón bajo la vigilancia de los guardias. “¡Nunca quise esto! ¡Me obligaron!” grita mientras es conducido fuera. Pero sus palabras ya no encuentran consuelo en nadie.

Desde ese momento, su destino queda en manos de la justicia, y su relación con el resto de la familia Luján parece condenada para siempre.

La Promesa entra así en una nueva fase donde la traición, la venganza y los secretos continúan marcando el rumbo de sus personajes. ¿Qué hará ahora el Duque de Carril al verse expuesto? ¿Cuál será el precio que pagará Curro por su traición?

¿Y qué papel jugará Burdina en los próximos acontecimientos? Lo que está claro es que nada volverá a ser igual en el palacio después de esta noche inolvidable.