Mar Flores responde con firmeza y distancia a la polémica sobre el posado familiar de Terelu Campos, afirmando: “No sé de qué cumpleaños hablas”.

En un reciente evento de moda, Mar Flores, la destacada modelo y presentadora, se encontró en el centro de la atención mediática tras las controversias surgidas en torno a una fotografía familiar de Terelu Campos, capturada durante la celebración de su 60 cumpleaños.

La imagen ha generado un torbellino de reacciones, especialmente debido a las tensiones familiares que han salido a la luz, en particular tras la publicación de las memorias de Mar, donde se abordan aspectos delicados de sus relaciones personales.

Durante un desfile de Carolina Herrera, los periodistas no tardaron en interrogar a Mar sobre el tema candente que ha acaparado titulares.

Con su habitual aplomo y una actitud que reflejaba tanto desconcierto como desdén, Mar respondió a las preguntas sobre la polémica foto con una frase que dejó a todos sorprendidos: “No sé de qué cumpleaños me estás hablando”.

Esta declaración no solo subraya su intención de mantenerse al margen de las controversias, sino que también revela la complejidad de la situación entre ella y Terelu.

La relación entre ambas ha sido objeto de especulación y debate, especialmente por el apoyo público que Terelu ha mostrado hacia Carlo Costanzia, su padre, en un contexto donde las memorias de Mar han arrojado luz sobre viejas rencillas familiares.

Al ser cuestionada sobre el supuesto conflicto con su hijo, Mar, con una sonrisa que denotaba confianza, se defendió diciendo:

“No presto atención a lo que se dice, estoy encantada de hacer el programa con mi hijo, estamos muy felices y hemos tenido dos jornadas de trabajo muy productivas”.

Sus palabras reflejan una clara intención de priorizar su carrera y su felicidad familiar, sin dejarse llevar por las habladurías que la rodean.

La modelo también aprovechó la ocasión para hablar sobre su experiencia en el programa DecoMasters, donde se enfrenta a retos creativos y logísticos.

“Es un trabajo muy exigente, no se trata solo de decorar; trabajamos con un presupuesto limitado, mostramos una decoración accesible para todos los bolsillos y es un programa increíble”, comentó Mar, destacando su dedicación y el esfuerzo que implica el proyecto.

Al ser nuevamente interrogada sobre la fotografía familiar de Terelu, Mar mostró una actitud de total indiferencia.

“No sé de qué me hablas, he trabajado doce o catorce horas… no tengo nada que ver con las polémicas”, afirmó, enfatizando su deseo de no involucrarse en disputas públicas.

Su respuesta fue contundente y clara, dejando entrever que su enfoque está en su trabajo y en las cosas que realmente importan en su vida

La celebración del cumpleaños de Terelu, que debería haber sido un momento de alegría y celebración familiar, se ha convertido en un campo de batalla mediático, donde las palabras de Mar y el apoyo de Terelu hacia su padre han sido analizados y discutidos en profundidad.

La tensión entre ellas es palpable, y aunque Mar ha intentado desvincularse de la controversia, no se puede negar que su relación con Terelu está marcada por una historia compleja y llena de matices.

En medio de este torbellino, Mar Flores ha decidido mantener su postura y no dejar que las controversias la afecten.

Su enfoque en su carrera y su familia parece ser su prioridad, y aunque el ruido mediático sigue creciendo, ella se mantiene firme en su decisión de no participar en la polémica.

Con una trayectoria profesional sólida y una vida familiar que busca proteger, Mar Flores se perfila como una figura que, a pesar de las adversidades, sigue adelante con determinación y clase.

Así, la polémica en torno al posado familiar de Terelu Campos y la respuesta de Mar Flores se convierte en un recordatorio de que, a menudo, las apariencias engañan y que detrás de cada imagen hay historias y relaciones que pueden ser mucho más complicadas de lo que parecen.

En un mundo donde la vida privada de los famosos es constantemente expuesta, Mar ha elegido proteger su autonomía y su felicidad, dejando claro que hay temas que prefieren no discutir públicamente, y que la familia, aunque compleja, siempre será un asunto delicado.