Miriam Moreno ha reflexionado sobre cómo ha sido adaptarse a los cambios en ‘Mañaneros 360’ y la incorporación de Adela González

Desde el estreno de ‘Mañaneros 360’ en 2023, Miriam Moreno ha sido uno de los rostros más constantes y reconocidos del matinal de La 1, un programa que ha atravesado numerosos cambios desde su inicio.

La llegada de Adela González en septiembre pasado, tras la salida de Jaime Cantizano, marcó una nueva etapa en el formato que ha generado muchas expectativas y también cierto debate interno.

En una entrevista exclusiva, Miriam Moreno se sinceró sobre cómo ha vivido esta transición, el ambiente de trabajo con Adela y la evolución del programa que busca renovarse para ganar audiencia en un contexto mediático cada vez más competitivo.

Miriam comenzó compartiendo que, a pesar de las dificultades propias de cualquier cambio, siente que el equipo ha sabido adaptarse bien.

“Estamos muy contentos con el apoyo de la audiencia, lo cual significa que estamos haciendo bien nuestro trabajo y asegura la continuidad del equipo contratado”, afirmó con satisfacción.

Para Miriam, esta respuesta favorable del público es una señal clara de que las modificaciones introducidas, tanto en contenido como en dinámica, están dando frutos.

Destacó que el programa ha vuelto a poner el foco en la actualidad política, un terreno que no se tocaba con tanta intensidad en etapas anteriores, lo que ha convertido cada emisión en una experiencia informativa “trepidante”.

Sin embargo, no todo ha sido fácil ni libre de nostalgia. Miriam confesó echar de menos a compañeros que formaron parte de las primeras temporadas, como Marc Santandreu, con quien comenzó copresentando el programa.

“Echo de menos a los especialistas de corazón, a la familia que habíamos formado”, lamentó al referirse a la eliminación de la sección de crónica social y la salida de colaboradores como Lydia Lozano, María Eugenia Yagüe, Alberto Guzmán o Alba Carrillo.

Este cambio ha generado cierta incertidumbre en el equipo, aunque Miriam subrayó que es parte de la lógica televisiva.

“Siempre se intenta cambiar para bien. Si los que toman las decisiones consideran que hay que hacer modificaciones, podemos ponerlas en duda, tenemos espíritu crítico, pero al final es la audiencia quien decide”, señaló con madurez y realismo.

En cuanto a la relación con Adela González, Miriam fue clara y rotunda: “Genial. Es una gran compañera, muy generosa conmigo desde el principio. Creo que nos cuidamos mutuamente y hay sintonía. No concibo otra manera de trabajar en equipo”.

Esta afirmación descarta rumores sobre tensiones entre las dos presentadoras y refuerza la imagen de un equipo unido, que a pesar de las presiones, mantiene un ambiente de respeto y colaboración.

Miriam enfatizó la importancia de la amistad y el apoyo mutuo en un entorno que puede ser muy exigente.

“Se tiene amigos. Antes he mencionado a Marc y podría darte una lista interminable de compañeros que ya son familia”, aseguró, y recordó también el papel fundamental del equipo técnico, desde maquillaje hasta peluquería, que ofrece soporte incluso en momentos personales difíciles.

El contexto en el que ‘Mañaneros 360’ se ha renovado no es sencillo. La competencia televisiva en las mañanas se ha intensificado, con programas rivales como ‘Espejo Público’ o ‘El programa de Ana Rosa’ luchando por captar la atención del público.

Además, la incorporación de Javier Ruiz trajo un cambio de enfoque en la información, apostando por un análisis más profundo y menos sensacionalista, algo que Miriam y el equipo han tratado de consolidar.

“Ahora hay actualidad política, que hacía mucho que no tocaba, está siendo informativamente trepidante.

Sigo aprendiendo todos los días y eso es apasionante”, explicó Miriam, reflejando su compromiso profesional y su interés por mantener la calidad informativa del espacio.

Por otro lado, la decisión de eliminar la crónica social y algunos colaboradores emblemáticos ha sido uno de los movimientos más polémicos de esta nueva etapa.

Miriam fue honesta al respecto, expresando su añoranza por “la familia que habíamos formado”, pero también mostró comprensión hacia la dirección. “Tenemos espíritu crítico, pero al final es la audiencia quien decide. Y ahora los datos son buenos en ese sentido”, afirmó.

Este equilibrio entre crítica interna y aceptación externa demuestra una postura profesional que busca anteponer el éxito del programa sobre preferencias personales.

Este proceso de renovación también ha supuesto retos personales y profesionales para Miriam Moreno.

Adaptarse a nuevos compañeros, cambios en la estructura del programa y en el contenido exige flexibilidad y esfuerzo constante. Pero como ella misma reconoce, la experiencia ha sido enriquecedora y un aprendizaje diario.

“Sigo aprendiendo todos los días y eso es apasionante”, confesó, destacando que el ambiente de trabajo es fundamental para sobrellevar los desafíos de un medio tan dinámico como la televisión.

En definitiva, la entrevista con Miriam Moreno ofrece una visión cercana y sincera de lo que supone trabajar en un matinal de gran audiencia en plena transformación.

La periodista transmite un mensaje de esperanza y profesionalismo, apuntando que, aunque el camino no ha sido fácil, la pasión por informar y conectar con el público sigue siendo la fuerza motriz que impulsa a todo el equipo de ‘Mañaneros 360’.

Mientras tanto, la competencia se intensifica y los espectadores están atentos a cada cambio, esperando que esta nueva etapa consolide al programa como una referencia informativa en las mañanas de La 1.