La boda de Nacho López-Quesada Rubio y María Loscertales Beca, celebrada en una hacienda familiar cerca de Sevilla, reunió a la alta sociedad española en una ceremonia llena de tradición, elegancia y detalles familiares inolvidables.

La elegante boda de Nacho López-Quesada Rubio y María Loscertales Beca, conocida cariñosamente como Maru, se celebró en un impresionante entorno a las afueras de Sevilla, en una hacienda del siglo XVII que pertenece a la familia de la novia.

Este evento, que reunió a alrededor de 350 invitados de la alta sociedad, fue un testimonio del amor de la pareja, que ha florecido durante más de nueve años.

Maru, que trabaja en el departamento de asesoramiento gubernamental del Tony Blair Institute for Global Change en Abu Dhabi, proviene de una destacada familia de empresarios andaluces.

Su padre, un renombrado empresario, ha dejado una huella significativa en la región. Por su parte, Nacho, que trabaja en ADQ, el fondo soberano de Abu Dhabi, es el mediano de tres hijos de Ignacio López-Quesada Abelló y la escritora e historiadora María José Rubio.

Su familia, con raíces en el mundo bancario, también está conectada a la aristocracia española, siendo primo segundo de Victoria López-Quesada, hija de la princesa Cristina de Borbón-Dos Sicilias.

La ceremonia comenzó alrededor de las 19 horas, cuando Nacho, acompañado de su madre vestida por la firma Cortana, hizo su camino hacia el altar.

Llevaba un elegante chaqué que combinaba a la perfección con su corbata verde, un detalle que resaltaba sus ojos. Poco después, Maru apareció del brazo de su hermano mayor, Simón Loscertales, quien actuó como padrino.

La novia deslumbró a todos con un vestido nupcial de seda plisada diseñado por Sole Alonso, un modelo sencillo que dejó todo el protagonismo a su espectacular tiara de rubíes y brillantes, una herencia familiar del novio.

La ceremonia religiosa fue oficiada por el padre Ignacio Jiménez Sánchez-Dalp, un sacerdote de renombre que ha estado presente en muchos momentos importantes de la Casa de Alba.

Debido a la limitación de espacio en la capilla, la mayoría de los invitados se acomodaron en uno de los patios de la hacienda, donde se instaló una gran pantalla exterior para que todos pudieran seguir la ceremonia.

La atmósfera era mágica, con una decoración campestre de inspiración italiana, que incluía olivos, limones y buganvillas, diseñada por el talentoso florista sevillano Eduardo Ramos.

Después de convertirse en marido y mujer, Nacho y Maru ofrecieron un cóctel variado a sus seres queridos, preparado por el catering Alda y Terry, que fue un verdadero festín para los sentidos.

La cena consistió en un delicioso gazpacho de guinda con teja de cebollino y gambones como primer plato, seguido de corvina al horno con tomatitos confitados y verduras frescas como plato principal.

Para el postre, los invitados disfrutaron de una exquisita tarta árabe y tatín de manzana, todo presentado con un cuidado extremo en los detalles.

Los meseros, que llevaban ilustraciones de Casilda López-Quesada, hermana del novio, añadieron un toque artístico y personal a la celebración.

La música estuvo a cargo del DJ Adríán Lozano, amigo cercano de Victoria de Marichalar, quien también había animado la reciente boda de Belén Écija, hija de la actriz Belén Rueda.

La fiesta se extendió hasta altas horas de la noche, con los invitados disfrutando de un ambiente festivo y lleno de alegría.

Este enlace no solo simboliza la unión de dos familias prominentes, sino que también marca un nuevo capítulo en la vida de Nacho y Maru, quienes regresarán a Oriente Medio, donde han residido durante más de tres años.

Sin embargo, en este momento, están disfrutando de su luna de miel en el sur de Francia e Italia, donde están creando recuerdos inolvidables.

La boda de Nacho y Maru fue un evento que capturó la atención de la alta sociedad y los medios de comunicación, no solo por la elegancia del evento, sino también por la historia de amor que representa.

La combinación de tradición, modernidad y un toque de glamour aristocrático hizo de esta celebración un momento verdaderamente memorable, que quedará grabado en la memoria de todos los asistentes.

Con este enlace, Nacho López-Quesada y Maru Loscertales Beca han puesto el broche de oro a su historia de amor, un amor que ha trascendido el tiempo y las circunstancias, y que promete seguir creciendo en los años venideros.