El nombre elegido por Rafa Nadal y Mery Perelló para su segundo hijo es todo un homenaje a la familia.

El pasado jueves 7 de agosto de 2025, la familia formada por Rafa Nadal y Mery Perelló creció con la llegada de su segundo hijo, un momento lleno de discreción y emociones que tuvo lugar en el Hospital Quirónsalud Palmaplanas de Palma de Mallorca, el mismo centro donde nació su primogénito, Rafael, en 2022.

La noticia, que inicialmente se mantuvo en el más absoluto secreto para preservar la intimidad de la pareja, se confirmó apenas dos días después cuando Mery Perelló fue dada de alta y regresó a su hogar en Manacor para iniciar la convivencia con su recién nacido y su familia.

Este segundo nacimiento llegó en un momento en que Rafa Nadal se encuentra viviendo un retiro planificado del tenis profesional, anunciado para noviembre de 2024, y en el que prioriza la vida familiar sobre los focos y eventos públicos.

Precisamente, la última aparición del tenista en un acto público se registró el lunes 4 de agosto durante la recepción veraniega en el Palacio de Marivent ofrecida por la Casa Real Española, donde Nadal coincidió con el Rey Felipe VI, la Reina Letizia, la Reina Sofía, y por primera vez en este evento con la Princesa Leonor y la Infanta Sofía.

La ausencia notoria de Mery Perelló en esta cita despertó rumores sobre un inminente nacimiento, que fueron confirmados días después.

El nombre elegido para el nuevo integrante de la familia es Miquel, un homenaje muy especial que la pareja quiso hacer al padre de Mery Perelló, fallecido en abril de 2023 a los 63 años tras una larga enfermedad.

Este detalle refleja la importancia que la familia tiene para Rafa Nadal y su esposa, y pone de manifiesto un lazo emocional muy profundo con sus raíces y seres queridos.

En una entrevista reciente con la revista Elle, Nadal había expresado ya cómo la paternidad transformó su vida:

“La paternidad me ha hecho valorar más el tiempo en familia y priorizarlo por encima de todo”, afirmó el tenista, quien desde su anuncio de retiro ha cambiado su ritmo de vida para enfocarse en lo que considera esencial.

La llegada de Miquel no solo representa un crecimiento en su núcleo familiar, sino también un nuevo capítulo lleno de plenitud y felicidad para ambos padres.

El entorno cercano de Rafa y Mery ha mostrado un gran respeto hacia su privacidad durante este período, respetando la voluntad de la pareja de mantener al margen del público la intimidad de estos momentos tan especiales.

Sin embargo, no han faltado los detalles compartidos por amigos y familiares que subrayan la alegría y la unión familiar que rodean a este nacimiento.

Este acontecimiento llega en un contexto donde Rafa Nadal continúa siendo una figura admirada no solo por sus logros deportivos, sino también por su humildad y compromiso con la familia.

Su decisión de limitar las apariciones públicas y dedicar más tiempo a su vida privada ha sido bien recibida por sus seguidores, quienes valoran ver a un deportista en plena transición hacia una nueva etapa.

La familia Nadal-Perelló ahora celebra con gran entusiasmo la llegada de Miquel, un niño que ya tiene un significado muy especial y que representa, más allá de un nombre, la continuidad de unos valores y el recuerdo imborrable de un abuelo que sigue presente en sus corazones.

Rafa y Mery afrontan esta nueva etapa con la misma discreción que caracteriza su relación, pero con una felicidad que se siente en cada gesto y palabra.

Este nacimiento marca un punto de inflexión en la vida del extenista mallorquín, quien tras una carrera repleta de éxitos y sacrificios, parece haber encontrado en la familia el verdadero significado de la felicidad y la plenitud.

La llegada de Miquel es mucho más que un acontecimiento familiar: es una declaración de prioridades y de amor que Rafa Nadal ha decidido compartir en su mundo privado, lejos del ruido mediático y con la tranquilidad que siempre ha buscado.