Tras descartar las pasarelas, la joven estudia diseño en Nueva York y mantiene su vida alejada de los focos.

El llamativo silencio de Cristina y Victoria, las hijas gemelas de Julio  Iglesias: dónde están y un gran enfado

Hay personas para las que el mundo no tiene fronteras, que han conocido casi sin querer y sobre todo sin demasiado esfuerzo un gran número de países y para las que coger un avión es el pan de cada día, lo más normal del mundo.

Es así para alguien que tiene un padre español, una madre holandesa, dos hermanos viviendo en Miami -donde ella misma nació-, otros viviendo en Indian Creek -que fue donde creció-, y que pasa largas temporadas estivales en Marbella.

Nos referimos a Cristina Iglesias, una de las gemelas hijas de Julio Iglesias y Miranda Rynsburguer.

La vida de lujo de Cristina, la hija más discreta de Julio Iglesias y  Miranda Rijnsburger | Mujerhoy

¿Y por qué hablamos de Cristina y no de su hermana Victoria o de Miguel Alejandro, Rodrigo o Guillermo? Pues porque es ella la que, teniendo la posibilidad de estar cerca de alguien de su familia en muchos puntos del mundo, ha decidido instalarse en uno en el que casualmente está alejada de todos, Nueva York.

Así, la joven, de 24 años, se encuentra centrada en sus sueños de futuro y en la moda.

A pesar de que hace años la revista de cabecera de la familia Iglesias publicó que de pequeña siempre quiso estudiar criminología y fantaseaba con ser agente del FBI, una vez pasados los años terminó decantándose por la moda.

Hace algunos años ambas hermanas se plantearon seguir los pasos de su madre sobre las pasarelas, pero finalmente descartaron la opción y ahora cada una ha tomado su camino.

Victoria se ha mudado a Londres donde ha comenzado a estudiar producción y cinematografía y Cristina a la Gran Manzana para formarse en diseño.

El plan de Victoria y Cristina, las gemelas de Julio Iglesias, en su casa  de Marbella

Allí ya se ha dejado ver con amigos y haciendo deporte, pues su madre les ha inculcado desde muy pequeñas la importancia de la vida sana, tanto que incluso crearon hace dos años su propia marca de productos vitamínicos y complementos alimenticios naturales bajo el nombre de Tribeü, una iniciativa que comenzaron con muchas ganas pero que ha ido perdiendo fuerza y desde hace dos años ya ni siquiera se actualiza el perfil de Instagram. Igual en algún momento retoman y hacen resurgir esta iniciativa, pero por el momento parece estar en compás de espera.

Y es que ellas están centradas en otra cosa, porque cambiar de ciudad no es fácil. Además de comenzar nuevos estudios, hay que instalarse, conocer el lugar y hacer amistades, algo en lo que Cristina tiene cierta ventaja puesto que ha viajado en muchas ocasiones a esta ciudad y además ya cuenta con personas de confianza que también pasan por allí a menudo.

La joven es una de las mejores amigas de Sebastián Yatra, de hecho, fue una de las acudió a mostrar su apoyo al cantante el pasado mes de noviembre cuando encarnó el papel Billy Flynn en el musical ‘Chicago’, celebrado en el Ambassador Theatre de Nueva York.

Las miras estaban puestas en la presencia de Aitana allí, pero fue Cristina quién estuvo a su lado, aunque en su caso no les une ninguna relación sentimental si no una amistad que ya cuenta varios años y que no parece que vaya a tornarse en nada más.

Vida privada

Cristina Iglesias exprime los días de sol en Marbella

Su presencia en este espectáculo, igual que muchas otras cosas de su vida, apenas han trascendido porque, cuando cumplió la mayoría de edad comenzó a ser más activa en redes sociales, lo cierto es que en un momento dado dejó de serlo y se ha comentado en muchas ocasiones que esto se debe a que a sus padres no les gusta que comparta los pormenores de su vida, y ella parece estar de acuerdo con esto, por eso trascienden muy pocos detalles de su día a día.

Sin embargo, si hay algunas cosas que sí se saben, como el hecho de que le encanta España, que considera que, aunque su físico es más holandés y parecido a su madre, su personalidad es más española, y que a pesar de estar viviendo en Estados Unidos este verano no va a cambiar y pasará una parte de él en Cuatro Lunas, su impresionante finca de Marbella, y quizá otra en la nueva casa que su padre ha adquirido en Orense, de donde era originario su abuelo.

Aunque quizá también viaje con sus amigos más cercanos, un plan que ya ha repetido los dos últimos veranos, pero siempre con toda la discreción posible puesto que, para sus padres, sobre todo para Julio Iglesias, la seguridad está por encima de todo, y todos sus hijos respetan esta máxima y la hacen extensible a amigos y parejas.

Aunque ahora, alejada de los suyos y en la ciudad que nunca duerme quizá poco a poco Cristina se anima a mostrar un poco más de sí misma y acabar con ese halo de misterio que envuelve a los Iglesias Rynsburguer.