Rocío Jurado, una de las voces más poderosas e icónicas de la música española, no solo dejó huella en España y Latinoamérica, sino también en Estados Unidos, país que consideraba su “segundo hogar”.

10 personalidades analizan el legado artístico de Rocío Jurado y su  vigencia actual

Su conexión con el mundo anglosajón llegó a niveles diplomáticos, llegando incluso a compartir momentos con figuras tan emblemáticas como el expresidente Ronald Reagan.

Durante los años 80, Rocío Jurado vivía parte del año en Miami, donde tenía una residencia.

La ciudad, con una fuerte comunidad hispana, se convirtió en un refugio para la artista y en un punto clave para su proyección internacional.

La cantante supo aprovechar su fama para llevar la copla y la canción española a escenarios donde pocos artistas españoles habían llegado.

El encuentro entre Rocío Jurado y Ronald Reagan en 1985

Rocío Jurado y Ronald Reagan

En 1985, la Casa Blanca organizó una recepción en el estado de Florida, donde Rocío Jurado fue invitada como representante destacada de la cultura española.

El evento fue presidido por el entonces presidente Ronald Reagan, quien, al encontrarse con la artista, le preguntó si vivía en Estados Unidos.

Con su habitual carisma, Rocío respondió en un inglés improvisado pero entrañable: “En España, but this is my second country, mister presidente.”

La respuesta, a medio camino entre el español y el inglés, encantó a Reagan y quedó como una anécdota inolvidable que demuestra el respeto y cariño que la artista sentía por Estados Unidos.

Una segunda invitación con George Bush

Rocío Jurado y George H.W. Bush - 196

El encuentro con Ronald Reagan no fue el único hito en la relación de Rocío Jurado con la política estadounidense.

En 1987, fue nuevamente invitada a un evento oficial en EE.UU., esta vez para actuar ante el entonces vicepresidente George H. W. Bush, quien años más tarde también sería presidente.

Estas invitaciones evidencian el impacto cultural que Rocío Jurado tuvo más allá del mundo hispanohablante.

La trayectoria internacional de Rocío Jurado y su presencia en actos oficiales en Estados Unidos la convierten en una embajadora no oficial de la música y cultura española.

Su voz, elegancia y capacidad de conectar con públicos de todo el mundo hicieron de ella una figura universal, admirada tanto por fans como por líderes mundiales.