La actriz acude este miércoles a ‘El Hormiguero’ para hablar de sus últimos proyectos tras ser homenajeada en el Festival de cine de Huesca.

Victoria Mérida Rojas, conocida artísticamente como Victoria Abril, nació el 4 de julio de 1959 en Madrid.

Reconocida por su magnetismo en la pantalla y su versatilidad, la vida de Victoria Abril fuera del foco público ha sido igualmente apasionante y, en ocasiones, dramática.

Desde joven, Victoria mostró una inclinación natural hacia las artes. Pasó parte de su infancia en Málaga, donde sus intereses en la actuación y el baile comenzaron a tomar forma.

A los quince años se trasladó a Madrid para estudiar en la Real Escuela Superior de Arte Dramático y Danza, y pronto debutó en televisión con el programa ‘Un, dos, tres… responda otra vez’.

El éxito internacional le llegó gracias a sus colaboraciones con Pedro Almodóvar en películas como ¡Átame!’ (1990) y ‘Tacones lejanos’ (1991).

Estas actuaciones consolidaron su estatus como una estrella y le abrieron puertas en el cine europeo. Su papel en ‘Amantes’ (1991) le valió el Oso de Plata a la Mejor Actriz en el Festival de Berlín, confirmando su talento.

Una mentira dolorosa

Sin embargo, detrás de su carrera brillante, la vida personal de Victoria ha estado marcada por eventos significativos.

Uno de los más impactantes fue descubrir, ya adulta, que su padre, a quien creía muerto, estaba vivo hasta poco antes de que ella lo buscara.

Su madre le había mentido toda su vida, y la verdad le fue revelada por su abuela: «Tu padre vive. No quiso saber nada de tu madre ni de ti. Y se fugó…».

Este descubrimiento provocó una profunda búsqueda que terminó trágicamente cuando, tras sortear la seguridad del Ministerio de Obras Públicas donde él trabajaba, le informaron de que su padre había fallecido hacía solo unos días.

Victoria nunca perdonó a su madre por esta mentira, lo que cimentó una relación tormentosa entre ambas.

Los problemas de salud de su madre

El drama familiar ha seguido a Victoria a lo largo de los años. En 2016, durante una emotiva conversación en ‘MasterChef Celebrity’, reveló entre lágrimas los problemas de salud de su madre.

Relató cómo, tras cambiarla de residencia, su madre se atragantó con un arroz mal preparado y, desde entonces, había sido puesta en un régimen de líquidos, lo que le provocaba un sufrimiento enorme y frecuentes peticiones de eutanasia por parte de su madre.

Un controvertido discurso ‘negacionista’

Victoria también ha sido abierta sobre sus puntos de vista controvertidos. Se declaró negacionista (denominó al coronavirus ‘coronacirco’ y habló de «plandemia») y antivacunas en una rueda de prensa de los premios Feroz, lo que generó una considerable polémica.

Sus hijos y los dos amores de su vida

En su vida sentimental, Victoria ha tenido relaciones que han capturado la atención pública.

Tiene dos hijos, Martín y Félix, con el cineasta francés Gérard de Battista, con quien también ha colaborado profesionalmente.

Su matrimonio anterior con el productor y exfutbolista chileno Gustavo Laube también formó parte de su vida en un momento crucial de su carrera.

A pesar de las turbulencias, Victoria Abril ha mantenido su pasión por la música, lanzando varios álbumes de bossa nova y boleros.

Esta faceta artística es una extensión de su espíritu creativo y su deseo de explorar nuevas formas de expresión.

Residente en Francia durante gran parte de su vida, Victoria ha fusionado sus raíces españolas con una perspectiva internacional, convirtiéndose en una embajadora cultural de ambos países.

Su capacidad para reinventarse y su compromiso con su arte siguen siendo una inspiración para muchos.

Victoria Abril no es solo una de las actrices más talentosas de su generación, sino también una mujer compleja y multifacética. Su vida privada, marcada por el drama y la resiliencia, refleja su fortaleza y dedicación.