Una relación rota que va de mal en peor.

El segundo se despidió de los ruedos con una multitudinaria corrida en la que no se vio a su hermano mayor.

Por allí sí estuvieron su hija Cayetana, Manuel Vega, Kiko Rivera y muchos más.

Ya sea Rivera o Pantoja, lo cierto es que algo hay en esas sangres que provoca que las familias no acaben de arreglarse. Era tarde grande de toros en La Maestranza y Cayetano Rivera se despedía de los ruedos. Por allí estaba todos… o casi todos.

Porque por más que la gente buscaba, por allí no aparecía el hermanísimo, Francisco Rivera, en lo que fue la constatación de que la relación entre los dos hermanos está aparentemente rota y que va de mal en peor.

Nadie vio a Francisco Rivera porque aparentemente no estuvo, a menos que se quedara bien oculto, cosa que no suele. Su ausencia en el glamuroso tendido de la Maestranza de Sevilla llamó la atención toda la prensa que acudió a cubrir el gran día y de los asistentes que están al tanto de las desventuras y tensiones de la familia.

Cayetano Rivera, de familia de toreros, decía adiós a las arenas de la plaza en su coso más querido y en la Feria de Abril. Allí acudió Cayetana Rivera, tan cercana siempre a su tío, junto a su pareja, Manuel Vega, su novio desde hace cuatro años.

También estaba DJ Kiko Rivera, apostado en un burladero y todo lo cerca que se podía estar de su hermano mediano. Fiel a su nueva discreción adoptada en las últimas semanas, evitó hacer cualquier comentario y se limitó a apoyar al torero que se iba, cediéndole con toda cortesía todo el protagonismo.

Años de desencuentros

Cayetano decía adiós a 20 años de carrera tras mamar desde bien pequeño los aires taurinos que siempre respiró la familia. Dos Riveras se hicieron toreros, Francisco y Cayetano, dos hermanos que mientras desarrollaban sus respectivas carreras también han ido acumulando no pocos desencuentros.

Cómo olvidar aquella Goyesca de hace un par de años, cuando Francisco Rivera, encargado de la gestión de la plaza, no tuvo en cuenta a su hermano a la hora de cerrar carteles, según explicó entonces la prensa.

Aquello fue el principio de una animadversión que, según se ha visto ahora en el adiós de Cayetano a los ruedos. «Esto disparó los rumores de mala relación entre los hijos de Carmina y la ausencia del mayor (o no presencia pública) los remata», afirma ‘Lecturas’.

«Estos son días felices y tristes a la vez»

Aunque improbable, igual estuvo, pero nadie le vio. Mientras otros familiares, famosos y famosillos de dejaron ver para apoyar al maestro en el día del adiós, Francisco Rivera permaneció invisible, algo difícil en una plaza como la de La Maestranza, donde para ver el ruedo debes como mínimo estirar el cuello. «Estos días son felices y tristes a la vez», decía Cayetano al finalizar la faena, quién sabe si también refiriéndose a su hermano mayor.

Las relaciones entre los hermanos Rivera son muy complicadas desde hace años. Francisco estuvo años sin hablarse con Kiko Rivera y no se sabe en qué punto están ahora las cosas entre ambos.

El hijo de Isabel Pantoja se lleva fenomenal con Cayetano mientras este, según se ha contado, permanece distanciado del mayor. Como ocurre con Pantoja, es muy complicado todo lo que lleva el apellido Rivera.