Antonio David Flores realizó un directo explosivo el 9 de septiembre donde reveló que Rocío Carrasco se reunió con su hija Rocío Flores para testificar en su contra, denunciando manipulaciones mediáticas y la parcialidad de periodistas reconocidos.

El 9 de septiembre se vivió un directo histórico de Antonio David Flores que dejó a todos los seguidores de la televisión española completamente impactados.

La jornada comenzó con la atención centrada en Juan Luis Galiacho, periodista reconocido con años de trayectoria, quien recientemente en el programa de Emma García había mencionado un supuesto reencuentro entre Rocío Flores y su madre Rocío Carrasco, sin dar detalles completos.

Antonio David no tardó en intervenir y hacer un llamamiento contundente a Galiacho para que contara toda la verdad sobre ese encuentro, revelando que la madre no se había reunido con su hija por afecto, sino para testificar en su contra en un juicio relacionado con la productora de Óscar Cornejo y Adrián Madrid.

Antonio David subrayó la importancia de la honestidad periodística: “Hazme caso, Galiacho, no te pringues por esta gentuza, cuenta la verdad sin especulación ni inventos”.

Durante su intervención, Antonio David recordó que muchos periodistas que se presentan como defensores del feminismo y de la justicia,

incluyendo nombres como Carlota Corredera, han actuado de manera contradictoria, silenciando hechos relevantes como el impago de pensiones de alimentos o las manipulaciones de información que afectan directamente a su hija.

“Es muy fuerte, han destruido la imagen de mi hija y la suya propia, porque Rocío Carrasco no fue a declarar a favor de Rocío Flores, hizo todo lo contrario”, enfatizó.

Antonio David recordó cómo el programa de Galiacho había dado versiones parciales que podían inducir a la audiencia a pensar que el reencuentro entre madre e hija había sido un momento cordial, cuando en realidad tenía implicaciones legales profundas.

El directo también abordó las polémicas con Mar Flores, quien apareció en El Hormiguero con Pablo Motos y detuvo abruptamente la conversación sobre un episodio de su pasado, señalando que ciertos aspectos estaban legalmente prohibidos de divulgar.

Mar Flores relató que una portada de revista sobre su relación con Alessandro Lequio y su hijo Carlo Constancia provocó un impacto enorme en su vida, llegando a ser ingresada en la UCI por la presión mediática.

La actriz explicó que la intención de la publicación era perjudicar su relación con Lequio y que los responsables incluían a Kiko Matamoros, Coto Matamoros, Alexandro Lequio y un cuarto hombre cuyo nombre no reveló, demostrando el alcance de la manipulación mediática que sufrió durante años.

Antonio David también criticó cómo se habían manejado judicialmente los supuestos episodios de violencia familiar, mencionando que Rocío Flores había presentado denuncias en paralelo contra su madre, hechos que rara vez se mencionan en los medios tradicionales.

Recordó cómo las sentencias judiciales no siempre reflejan la verdad vivida por las partes involucradas y destacó la diferencia entre la verdad judicial y la experiencia personal: “Una cosa es lo que decide un juez y otra la historia que cada uno ha vivido”, subrayó.

Además, Antonio David cuestionó la coherencia de los periodistas y figuras mediáticas que promueven una imagen de profesionalidad y ética, pero luego omiten información crucial que podría cambiar la percepción pública de los implicados.

Criticó especialmente a Carlota Corredera y María Patiño, destacando la contradicción entre sus discursos de defensa del feminismo y su silencio sobre el incumplimiento de obligaciones legales por parte de personas cercanas.

En el desenlace del directo, Antonio David insistió en que la información completa debía ser difundida para que la audiencia comprendiera la magnitud de los eventos:

el reencuentro de Rocío Flores con su madre, las manipulaciones mediáticas, los episodios de violencia familiar y la polémica portada que afectó profundamente la vida de Mar Flores.

Recordó que la justicia aún estaba en proceso sobre algunas medidas correctivas y delitos presuntamente cometidos al publicar ciertos contenidos, y que estas resoluciones podrían marcar precedentes importantes para la televisión española.

La jornada del 9 de septiembre no solo expuso la tensión mediática en torno a Rocío Flores y Mar Flores, sino que también evidenció cómo la información incompleta o manipulada puede afectar la reputación y la vida personal de los involucrados.

Antonio David Flores se mostró firme en su defensa de la verdad, la protección de su hija y la denuncia de prácticas periodísticas que considera injustas, dejando claro que continuará utilizando sus directos como plataforma para dar voz a las historias que otros ocultan o distorsionan.

Este directo dejó en evidencia la compleja red de conflictos familiares, mediáticos y judiciales que rodean a Tele5, y la manera en que las figuras públicas deben navegar entre la presión de los medios y la defensa de la verdad, convirtiéndose en un episodio que muchos consideran histórico en la crónica televisiva reciente.