💣 Aplausos, críticas y furia: así fue la reacción explosiva a Bertín Osborne imitando a María del Monte

Bertín Osborne ha vuelto al foco mediático, y esta vez no ha sido por sus declaraciones políticas ni por su vida personal, sino por una imitación que ha levantado ampollas.

En su paso por el plató de ‘Tu cara me suena’, el cantante y presentador decidió interpretar a la reconocida artista andaluza María del Monte.

Una elección que, de entrada, prometía risas y espectáculo, pero que terminó provocando una reacción en cadena de dimensiones impredecibles.

La actuación, caracterizada por una cuidada puesta en escena, maquillaje impecable y una recreación vocal sorprendentemente precisa, arrancó aplausos inmediatos del jurado.

Los presentadores y compañeros del concurso rieron y ovacionaron a Bertín al terminar su número.

Pero mientras en plató la atmósfera era de celebración, en las redes sociales la historia era muy distinta.

Minutos después de su emisión, Twitter, Instagram y Facebook comenzaron a llenarse de mensajes que iban desde el reconocimiento del talento de Bertín para la imitación…

hasta duras acusaciones de burla, transfobia y falta de sensibilidad.

Algunos usuarios señalaron que, aunque el programa siempre ha jugado con la parodia, la actuación de Osborne “cruzó una línea”, especialmente por tratarse de una figura tan representativa para el colectivo

LGTBI como María del Monte, quien en los últimos años ha hablado abiertamente sobre su identidad y su vida personal con valentía.

Otros, en cambio, defendieron a capa y espada la actuación, alegando que ‘Tu cara me suena’ es precisamente un show de imitaciones exageradas y humorísticas, donde nadie se salva de la caricatura y que todo

debe entenderse desde el marco del entretenimiento.

Aseguraron que Bertín cumplió con su papel sin ánimo de ofender y que, si algo hizo, fue rendir homenaje a una artista que marcó una época.

El problema, según muchos expertos en redes, es que la figura de Bertín Osborne ya venía cargada de polémica previa por sus opiniones públicas sobre temas sociales y políticos.

Por eso, su elección de imitar a María del Monte fue leída por algunos como una provocación encubierta, una jugada intencionada para generar ruido más allá de lo meramente televisivo.

Y lo logró.

El entorno de María del Monte no tardó en reaccionar.

Aunque la artista no hizo declaraciones directas, personas cercanas a su círculo afirmaron que se sintió “incómoda” al ver la actuación, y que “no le hizo ninguna gracia ser usada como personaje de burla en prime

time”.

La productora del programa, por su parte, defendió la actuación como parte del guion habitual del show, reiterando que no hubo mala intención ni ninguna directriz ofensiva en el planteamiento del número.

Mientras tanto, el propio Bertín no se ha quedado callado.

En declaraciones exclusivas a medios del corazón, afirmó: “Yo no me río de nadie, imité a una artista que admiro profundamente.

Si alguien se sintió ofendido, lo lamento, pero no me voy a disculpar por hacer mi trabajo en un programa de humor”.

Una postura que, como era de esperar, no hizo más que avivar la polémica.

Este nuevo incendio mediático ha puesto sobre la mesa una vez más el debate sobre los límites del humor en televisión.

¿Hasta qué punto se puede jugar con la imagen de otras personas? ¿Importa el contexto social del personaje imitado? ¿Se mide con la misma vara a todos los concursantes? Las preguntas siguen en el aire

mientras el país entero comenta, opina y se divide por una actuación que parecía inofensiva…hasta que dejó de serlo.

Lo que sí es seguro es que la imitación de Bertín Osborne no será olvidada fácilmente.

En una televisión cada vez más sensible a los temas identitarios, lo que antes era rutina hoy puede convertirse en escándalo.

Y Bertín, como tantas otras veces, ha conseguido lo que muchos buscan sin éxito: estar en boca de todos.

Aunque el precio haya sido, una vez más, la controversia.