🔥 “Son bastante peseteros”: Ex jefe de Mediaset REVIENTA el fichaje de Belén Esteban por TVE ✅

La televisión pública española vive una tormenta interna de proporciones épicas, y el epicentro tiene nombre propio: Belén Esteban.

Lo que parecía ser su regreso triunfal a las pantallas, esta vez en Televisión Española, ha derivado en una crisis inesperada con un protagonista secundario que ha decidido tirar de la manta: Baldomero Toscano, ex

director de producción de Mediaset.

Desde su programa “La tele por dentro”, el veterano ejecutivo ha decidido hablar claro.

Sin tapujos, sin paños calientes.

Y lo que ha dicho ha encendido todas las alarmas en Prado del Rey.

Según Toscano, la espontaneidad de Belén Esteban es real, sí, pero también tiene un precio.

Literal.

“Es una persona con mucha verdad, con mucha ingenuidad, pero también es muy de arranques”, dijo el ex directivo, en un tono que parecía comprensivo, hasta que soltó la frase que ha hecho explotar titulares en

todo el país: “Otra cosa es que se vaya Belén Esteban, como muchos otros, porque son bastante peseteros”.

Una acusación directa, sin eufemismos, que apunta a una realidad incómoda: la motivación económica como motor principal del desembarco de los ex Mediaset en la cadena pública.

Pero no se quedó ahí.

Toscano habló también del contexto que rodea esta tensión.

El nuevo programa de TVE, “La familia de la tele”, está registrando audiencias por debajo de la media de la cadena, una situación que ha generado preocupación no solo en los despachos de dirección, sino también

entre sus protagonistas.

“Cuando ves que tu programa no supera la media, te preguntas: ¿qué estamos haciendo mal?”, confesó el ex directivo.

La preocupación, según él, no es infundada.

El espacio aún no ha encontrado su sitio, y la falta de química en plató se ha hecho evidente.

Y justo en medio de ese clima, estalla la escena de Belén Esteban: en directo, visiblemente molesta, dejó entrever su deseo de abandonar el proyecto.

Una bomba emocional que generó una catarsis frente a las cámaras y que marcó un antes y un después en el programa.

Para Toscano, esa reacción tiene un trasfondo que muchos se niegan a ver.

“Está en su derecho de irse si no está a gusto, pero dudo mucho que se vaya de verdad.

Es un arranque más”, dijo con cierto tono escéptico.

Una forma elegante de sugerir que detrás del drama, podría haber una estrategia.

La cosa se pone aún más candente cuando se toca el tema que todos comentan por lo bajo: el sueldo de Belén Esteban.

Aunque TVE guarda silencio oficial, el periodista Diego Arrabal se atrevió a ponerle cifra desde su canal de YouTube: 18.

000 euros mensuales.

Una cantidad nada despreciable para alguien que, en pleno prime time, se plantea dejar su puesto a la mínima fricción.

¿Es justo ese sueldo en la televisión pública? ¿Se está pagando con dinero de todos una figura mediática más centrada en el espectáculo que en la profesionalidad?

La cifra ha levantado ampollas dentro y fuera de la cadena.

Mientras muchos se cuestionan si TVE está invirtiendo correctamente sus recursos, otros ven en este dato una evidencia más de que la televisión pública ha apostado por el morbo para competir en la jungla de las

tardes.

Y eso, para una cadena que se debe a la ciudadanía, no es poca cosa.

Belén Esteban, apodada “la princesa del pueblo”, ha construido su carrera a base de espontaneidad, escándalos y presencia constante en los medios.

Pero este nuevo capítulo en La 1 ha puesto a prueba su imagen.

¿Está preparada para el rigor de una cadena pública? ¿O solo ha trasladado el drama de los platós de Telecinco a un nuevo escenario? Las dudas crecen y la paciencia parece agotarse.

Por su parte, Toscano sugiere que no todo el peso debe caer sobre ella.

Habla de una cadena que no ha sabido orientar el formato, de un equipo que aún no encuentra cohesión, y de una dirección que, si bien apostó fuerte, ahora empieza a cuestionarse el rumbo.

Pero la frase que más resuena en el ambiente sigue siendo la misma: “Son bastante peseteros”.

No es solo una crítica a Belén, sino a una cultura televisiva que prioriza el dinero sobre el contenido, el contrato sobre el compromiso.

Y mientras la tensión crece, el futuro del programa pende de un hilo.

Toscano lo tiene claro: el verano será la prueba definitiva.

Si no levantan la audiencia, el formato caerá.

Y con él, la estrategia de fichar rostros conocidos para ganar audiencia.

La televisión pública está en un momento clave: o renueva su identidad o se convierte en una versión edulcorada de lo que ya fracasó en otros canales.

La bomba está lanzada, y ahora todo el mundo mira a TVE.

¿Responderán desde la dirección? ¿Harán ajustes en el contenido? ¿Belén Esteban seguirá o romperá definitivamente? Las cartas están sobre la mesa, pero lo que ya no se puede esconder es el malestar interno.

Un fichaje mediático que prometía revolución está derivando en una crisis de reputación para la cadena.

Y todo, por una mezcla explosiva de egos, expectativas incumplidas y mucho, muchísimo dinero público.

En definitiva, el espectáculo continúa, pero la audiencia ya no aplaude como antes.

La televisión pública está bajo la lupa, y lo que debía ser un golpe de efecto puede terminar siendo un bumerán.

Porque cuando la verdad se filtra desde dentro, como ha hecho Baldomero Toscano, ya no hay cortina de humo que tape lo evidente: el fichaje estrella de TVE podría acabar siendo su mayor error del año.

Y los espectadores, una vez más, tienen la última palabra.