¡Indignación en el Bernabéu! El VAR y Gil Manzano Desatan la Controversia en el Clásico

El Santiago Bernabéu fue el escenario de un partido crucial para el Real Madrid en su lucha por el título de liga.

Los aficionados esperaban una victoria convincente, pero el encuentro se vio empañado por decisiones arbitrales que han desatado una ola de indignación.

El árbitro Jesús Gil Manzano volvió a ser el centro de atención, y no precisamente por buenas razones.

Las decisiones erróneas y las omisiones del colegiado extremeño han puesto en tela de juicio la credibilidad del arbitraje en España.

La primera controversia llegó en la primera parte, cuando el Real Madrid dominaba el partido y generaba ocasiones claras.

Una jugada clave ocurrió cuando un defensor del Celta de Vigo cometió una mano dentro del área.

La repetición fue clara: el balón impactó en el brazo del jugador en una posición antinatural, interrumpiendo una jugada de ataque.

Sin embargo, Gil Manzano decidió no sancionar la falta, y el VAR, que debería haber intervenido, permaneció en silencio.

Este tipo de decisiones no son nuevas para el Real Madrid, que ha sido víctima de varias polémicas arbitrales esta temporada.

El penalti no señalado dejó al madridismo perplejo, pero lo peor estaba por venir.

En la segunda mitad, el despropósito arbitral alcanzó nuevas dimensiones.

Con el marcador igualado, el Celta anotó un gol que nunca debió haber sido válido.

El tanto nació de un córner mal señalado, ya que ningún jugador del Madrid tocó el balón antes de que este saliera por la línea de fondo.

A pesar de ello, Gil Manzano señaló saque de esquina, lo que permitió al Celta marcar.

Este error no solo afectó el marcador, sino que también impactó emocionalmente al equipo y a su afición.

La pregunta que todos se hacen es: ¿cómo es posible que, con toda la tecnología disponible, nadie detecte un fallo tan básico?

El partido continuó, y las decisiones arbitrales siguieron siendo cuestionadas.

En un contragolpe que pudo ser decisivo, Kilian Mbappé fue claramente agarrado por un defensor celeste.

El agarrón era evidente y cortó una jugada manifiesta de gol, pero Gil Manzano optó por no mostrar ninguna tarjeta.

Esto dejó a los aficionados frustrados, ya que la normativa es clara: una falta así debería haber resultado en una roja directa.

El tramo final del partido no trajo alivio, ya que el árbitro volvió a ignorar un empujón claro sobre Fede Valverde dentro del área.

El uruguayo cayó al suelo tras un contacto evidente, pero nuevamente, el VAR no actuó.

La situación se tornó aún más grave cuando, en los últimos minutos, se produjo otra mano clara de Marcos Alonso al bloquear un centro en el área.

Gil Manzano, una vez más, decidió no sancionar nada, lo que generó un gran enfado en el banquillo del Real Madrid.

A pesar de todos estos errores, el equipo logró una victoria clave que les permite seguir en la pelea por la liga.

Sin embargo, el triunfo no puede ocultar lo ocurrido en el campo.

La actuación de Gil Manzano ha alimentado aún más el descrédito que el arbitraje español ha acumulado esta temporada.

No es la primera vez que este árbitro genera controversia en un partido del Real Madrid.

Recientemente, su actuación en Mestalla con Jude Bellingham sigue fresca en la memoria de los aficionados.

La paciencia del madridismo está al límite, y la pregunta que todos se hacen es: ¿hasta cuándo?

La sensación de que hay una vara de medir diferente según el escudo no es nueva, pero se hace cada vez más evidente.

Los aficionados están cansados de ver cómo el VAR no actúa cuando es necesario, mientras que otros equipos parecen beneficiarse de decisiones arbitrales favorables.

La indignación se ha apoderado de la afición, que exige respuestas y acciones concretas del club.

¿Qué medidas debería tomar el Real Madrid frente al Comité Técnico de Árbitros?

Es una pregunta que resuena en todos los rincones del Bernabéu y que necesita una respuesta clara.

Los aficionados también están pidiendo una revisión del sistema VAR, que parece fallar en momentos críticos.

La confianza en el arbitraje se ha visto gravemente afectada, y muchos se preguntan si el sistema es realmente justo.

El Real Madrid tiene un compromiso con sus seguidores, y es imperativo que se tomen medidas para garantizar la integridad del juego.

El club debe defender a sus jugadores y a su afición, y no permitir que decisiones arbitrales injustas afecten su lucha por el título.

Los madridistas esperan que la situación mejore, pero la realidad es que cada semana surgen nuevas controversias.

La presión sobre los árbitros y el sistema VAR es inmensa, y el próximo partido será otra oportunidad para demostrar que se puede hacer mejor.

La historia del Real Madrid está llena de desafíos, pero la afición siempre ha estado a su lado.

La lucha por el título de liga continúa, y los aficionados están listos para apoyar a su equipo en cada paso del camino.

La pasión por el fútbol no se detiene, y cada partido es una nueva oportunidad para demostrar su valía.

Los ojos del mundo están puestos en el Real Madrid, y todos esperan que el club pueda superar las adversidades.

La historia de esta temporada está lejos de terminar, y cada partido cuenta.

Los aficionados están ansiosos por ver cómo se desarrollará esta saga en el futuro.

La indignación por el arbitraje es un tema que seguirá resonando, y el Real Madrid debe estar preparado para enfrentarlo.

El fútbol es un espectáculo que une a millones, y la justicia en el juego es fundamental para mantener esa unión.

Mientras tanto, el madridismo sigue luchando, con la esperanza de que la próxima jornada traiga un arbitraje más justo.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.

.