Amada por unos, criticada por otros,

Yolanda Andrade jamás ha pasado

desapercibida.

Ha protagonizado romances que hicieron

arder las portadas, confesiones que

incomodaron a figuras intocables y

escándalos que todavía dividen

opiniones. Pero también ha sabido

conquistar a su muy llamado público

conocedor con su humor único, sus

anécdotas y chistes que han sacado

carcajadas en más de una sala. Col de

Bruselas dicen porque las Pandoras nos

dijeron que se echaban pedos. No, no,

estoy morada

con col de Bruselas, por favor. Tenemos

imágenes que se preparó.

Fue protagonista de grandes telenovelas,

conductora de programas y sin duda un

personaje televisivo que se ha ganado su

lugar en la industria. Yolanda Josefina

Andrade Gómez nació el 28 de diciembre

de 1971 en Culiacán, Sinaloa, en una

familia de clase media.

Hija de Rolando Andrade y Rafaela Gómez,

creció en un hogar con sus cuatro

hermanos donde cada uno tenía una

personalidad muy distinta.

Desde pequeña mostró un carácter fuerte,

carismático y una inclinación natural

hacia el mundo del espectáculo.

Aunque su familia no tenía vínculos con

el medio artístico, su simpatía y

espontaneidad la hacían destacar en

cualquier lugar, perfilando desde

temprana edad a la mujer que más tarde

cautivaría a millones frente a la

pantalla.

Aunque su infancia transcurrió con

normalidad, años más tarde una

revelación familiar la impactaría

profundamente, pues descubrió que su

padre había tenido otros hijos fuera del

matrimonio.

Chistoso porque yo estaba graduándome de

primaria, entonces todas las niñas me

decían, “Ay, qué guapo está tu hermano.”

Y yo decía, “¿Qué hermano?” Entonces, mi

que está al lado de tu papá que no es tu

hermano y yo vi a mi papá, pero un

chamaquito ahí, pero dije, “No, no lo

conozco.” Y llego y me dice mi papá, “Mi

hijita, tu hermano.”

Y y viene una niña y me dice mi papá,

“Ah, mij hijita, bájate porque ahí viene

tu hermana.” Ah, caray. Y ay, ahora que

me acuerdo, se van a vivir los tres

juntos.

Ah, ¿qué sentiste?

Pues fui mucho familia, ¿no?

Una de las grandes amigas que Yolanda

tuvo desde su adolescencia fue Salma

Hayek. compartieron muchos momentos

juntas, entre ellos asistir juntas a

múltiples castings para que Salma

pudiera cumplir su sueño de convertirse

en actriz. En ese ir y venir, Salma notó

que Yolanda también tenía un talento

natural para desenvolverse frente a las

cámaras. Tanto fue así que, según cuenta

la propia Yolanda, fue Salma quien logró

convencer a su padre para que le

permitiera viajar a la Ciudad de México

y estudiar actuación en el Centro de

Educación Artística de Televisa. Mi

abuelita veía las novelas, obviamente, y

también mi vecina. Entonces, un día le

dije a mi vecina, a doña Rafa, “Doña

Rafa, yo cuando esté grande, digo, yo

algún día voy a estar en las novelas.” Y

me dice, “Ay, Oli, ponte a estudiar.” Lo

veía muy lejos, pero dice, “Pero, ¿por

qué no? Si ella puede, pues yo también

puedo.” Pues hicieron un sueño. Okay. Y

lo lograste. Y mira qué bien lo logró.

Al terminar la preparatoria, Yolanda

decidió mudarse a la capital para

estudiar en el SEA con una de muchos de

los artistas más reconocidos del país.

Me acuerdo que fui al casting. Este

Salma me peinó,

pues me peinó tan feo. A mí me duele

tanto la cabeza porque no parecía yo el

pecado de Yuki de por sí.

Nombre es Yolanda Andrade, tengo 17 años

en la colonia de Guadalupe en la ciudad

de Juliacara, Sinaloa. Por fin lo

encuentro, señor. Soy la

Ay, perdón.

So la so la muchacha de los

departamentos de la esquina. Me dejó un

pésimo trabajo en el advado.

Durante esa época, Yolanda vivió un

romance juvenil que pocos conocen. Ella

misma ayudó a que un joven aspirante

ingresara al SEA, con quien mantuvo una

breve relación y años más tarde él se

convertiría en uno de los galanes más

reconocidos de la televisión mexicana,

Mauricio Islas. una estética y que ahí

conociste como que a tu primera novia

que fue la que te llevó a la industria y

yo dije, “Fue novio de Yolanda Andrade

real.”

Es real. Fui novio de Yolanda. Te lo

puede contar ella también.

Sí, pero estaban chavitos, ¿verdad?

Chavito. Estoy hablando en el 90. Haz de

cuenta yo la conocí y ella estaba

estudiando en el CA y y le dije, “Ay, yo

quiero estar.” Entonces me llevó, hice

mi audición. Yo por parte de ella

llegué, fuimos al CA, hice mi audición,

entré y yo entré en el 91 al CA.

El debute Yolanda Andrade en las

telenovelas fue en 1991 con un papel

secundario en Yo no creo en los hombres.

¿Cómo me veo?

Muy bien. ¿A dónde vas?

Leonardo va a pasar por mí. Está loco.

Dice que vamos a ir a plantar un árbol.

Su talento no pasó desapercibido, ya que

solo dos años después, en 1993,

consiguió su primer papel protagónico en

las Secretas Intenciones, donde

compartió créditos con Cristian Castro y

Elena Rojo.

¿Qué te pasó?

No, no fue nada. F un con la prepa.

Traste mucho.

Esta producción fue clave para

consolidar su carrera como actriz.

Durante las grabaciones, Yolanda y

Cristian iniciaron una mediática

relación. Fue una etapa importante en

sus vidas, especialmente en los inicios

de sus carreras. En una ocasión, Yolanda

bromeó en una entrevista sobre su

primera experiencia sexual con él,

diciendo que no la perdió, sino que la

donó, aunque admitió que estaba muy

joven.

¿Es cierto que Cristian Castro perdió la

virginidad contigo?

Sí, yo yo con él. Vos con él. Ah, vos

con él.

Vos con él. O sea, la persona con la que

vos intimás por primera vez y perdés la

virginidad es eh Cristian Castro.

Sí.

Sin embargo, su romance no prosperó. La

relación llegó a su fin debido a

conflictos de Cristian con su madre

Verónica Castro, en los que Yolanda se

puso de lado de la actriz, lo que

provocó que se distanciaran. Años

después, en 2003, Yolanda Andrade tuvo

un momento memorable en su programa de

televisión, donde le mostró un video a

Verónica Castro de un encuentro que tuvo

con Cristian.

Enamudente,

enamorado, perdido.

Ay, lo disfrutamos muchísimo. ¿Qué

decías cuando nos veías, por ejemplo?

Pues se me hacía raro ver a Cristian en

la televisión. O sea, yo como no quería

que fuera artista y este de repente

verlo en la televisión y luego te veía

de pareja yo, “M, Dios mío, ya está

empezando la cosa aquí a caminar,

¿no?” Pero aparte pasó pasó algo bien

penoso que que

cuéntame la verdad, caminó, caminaba.

Pues caminó y caminaba.

Nos dimos, ¿no? Fue una historia de amor

muy bonita y nos dimos unos besos bien

deliciosos, pero perfecto que decía

corte. Ya hice bien.

Y aparte después de él abrir sus ojitos

y me decía, “Ah, yo creo que ya.”

Ay, qué lindo él. Tu gandalla.

Sí, aparte me cantaba con la guitarra.

Yo le regalé un cancionero. Vamos a ver

tal canción y ya cantaba otra canción y

ahí está. Es dulce el maldito cuando

quiere, eh, cuando no, no se quiso

aprovechar.

Lejos estaba Verónica Castro de imaginar

que años después se vería envuelta en un

escándalo mediático después de que

Yolanda revelara su presunta relación en

la que se habían casado en una ceremonia

simbólica en Ámsterdam.

Su éxito continuó con participaciones en

otras telenovelas muy populares como

Retrato de Familia en 1995.

Eres una idiota, ¿verdad? ¿Crees que no

me doy cuenta que todo esto lo haces

para dominarnos? Pero no, mamá, yo sé

quién eres, te conozco y a mí no me

engañas.

Sentimientos ajenos en 1996

con un corazón de piedra, Teresa,

no le importó destruir a mi familia

y los hijos de nadie en 1997.

Ay, qué tonta eres, Verónica.

Mejor ponte a rezar para que no te mate.

Durante estos años, específicamente en

1995,

Yolanda tuvo una relación sentimental

con la actriz argentina Lorena Meritano.

Ambas han confirmado este romance y

dijeron que fue algo muy breve pero

significativo.

Es que fuimos novias.

Algo que sucedió en el año 1995.

Fue muy chistosa la historia porque yo

estaba en el taller de la maestra

Barraza y el profe y eh pues empecé como

a recibir unas cartitas,

unas esquelitas y luego en la casa

flores y de verdad eh las herramientas

de ella para conquistar

eh son increíbles. Aparte no era una

época muy particular, pero fue muy corto

lo que vivimos. Pero yo lo recuerdo como

muy bonito. Tal vez no terminó bien en

ese instante,

como muy intenso.

Sí, sí.

Y también se conocería otro romance. Se

trataba de un integrante del grupo

Magneto, más específicamente Charlie.

Oye, a ver, cuéntame, porque eso sí creo

que no lo sabe absolutamente nadie.

Charlie de Magneto fue tu novio cuándo?

Ay, en un momento dado. En un momento

dado de juventud. Este, ellos están

todos apogeo del éxito delahuela y

todabuela, o sea, wow.

Eh,

y ya un niño muy decente y todo. Y me

acuerdo que en esa época por invito a su

cumpleaños, voy a Monterrey, eh, tenía

novio,

y me escondieron en un cuarto y le dije,

“Entonces, ¿para qué me invitas si me

voy a guardar? ¿Me vas a esconder?”

Claro.

Y cuando meter glosen, después ya me

salí

real, güey. Me desprendió. Yo estaba

enamorada de él. Sí, lo quiso mucho. La

neta sí, porque es muy buen niño, muy

era muy buen muchachito.

Su orientación sexual no era un tema de

discusión pública, ya que nadie

cuestionaba su atracción hacia las

mujeres, pues siempre se le veía rodeada

de hombres. Sin embargo, esta percepción

comenzó a cambiar con el inicio de su

carrera como conductora, especialmente

durante su participación en las Hijas de

la Madre Tierra, el programa que cocreó

junto a Monserrato Oliver.

Es a ver, no se ve que estaban hablando,

pero yo yo le quiero preguntar.

Preguntas. Ya me caíste gorda. Me voy.

Renuncio.

Oigan. Ay, qué bueno que se va. Este,

no, vamos a rar. Ven,

déjala, deja. Sí, sí, sí. Es lo que

quiere, es lo que quiere.

Ay, hazle, hazle.

En esa época la cercanía entre Yolanda y

Monserrat era innegable y se convirtió

en un secreto a voces.

Se les veía constantemente juntas, ya

fuera viajando por el mundo,

compartiendo vivienda o asistiendo a

eventos, lo que generaba especulaciones

sobre la naturaleza de su relación.

Aunque los medios y el público

comentaban su insepabilidad, ellas

mantuvieron su vida personal en privado.

Años más tarde, ya con la confianza que

les dio su consolidada carrera y su

programa Juntas, Yolanda y Monserrat

hablaron abiertamente del tema.

definitivamente tenía que salir contigo

del closet aquí en este programa.

Pues sí, después de 20 años, casi 20

años que tiene, cada quien se toma su

tiempo.

Exactamente.

Exactamente. Felicidades. El momento

indicado.

Confirmaron que su relación no solo era

de amistad, sino que habían sido pareja

sentimental durante 10 años.

Conoció.

La realidad fue que a mí me yo no vivía

en México, me mandan, me mandan traer

porque yo era imagen de una marca de

alcoholes,

entonces iban a hacer el programa de Año

Nuevo y en eso llega la productora, me

dice, “A ver, ven.” Y me empieza a meter

porque había mucha gente aquí viendo

cómo grababan y me pone ahí y volteé a

Yolanda así porque la como que la movió

y Yolanda estaba ahí viendo el ganado.

Llego. Yo de repente te volteó llorando

así con cara de perra. Me volteé a ver

así como que ya está queé por qué me la

empujan y yo, “No, no te preocupes, veo

perfecto.” Dije, “Na madre, ya le dije

chaparra a esta perra.”

Yo la vi y dije, “Dios mío, si existes,

manifiéstate.”

Y me fue a perseguir a donde me llevaron

a comer.

Ah, sí.

Y me me hizo que se me cerrara la

garganta porque

porque me me hablaba y me decía y no sé

qué y me yo yo dije, “Esta me está

tirando el pedo”. Porque nunca me habían

tirado el pedo, nada una mujer y dije,

¿será o no? ¿Qué pedo? Y me quedé muda,

no podía ni hablar yo.

Y está agua, por favor. Y yo gracias a

Dios me pidó agua.

Esta revelación no solo aclaró las

especulaciones de décadas,

sino que también fue un momento clave

para que Yolanda comenzara a hablar sin

tejo sobre su orientación sexual,

convirtiéndose en una figura pública que

defiende abiertamente a la comunidad

LGBTQI.

Yolanda exploró su faceta profesional en

la conducción con las hijas de la madre

Tierra, un show de viajes y entrevistas

caracterizado por el humor y la

espontaneidad que se convirtió en un

éxito rotundo por ser un formato tan

distinto al que se acostumbraba para la

época y marcó el inicio de una dupla

icónica en la televisión.

No, no más purina. ¿Qué más sigue

haciendo? Síguene con seco. Eh,

un un dice que no me en el programa. Una

taza y media de cucharadita de

bicarbonato. Ya te lo dije.

¿Cómo va a ser una taza de bicarbonato?

Yo una y media cucharadita.

Pero antes de que Yolanda Andrade se

consolidara como una de las conductoras

más influyentes, tuvo una participación

memorable en la televisión. En 2003

participó en la segunda temporada del

popular viality show Big Brother VIP.

Su entrada al famoso ojo no fue solo un

paso más en su carrera, sino un momento

crucial que la acercó aún más al

público.

A diferencia de las telenovelas donde

interpretaba un personaje, en este

programa Yolanda se mostró tal como era,

divertida, espontánea, directa y con un

gran sentido del humor. Su personalidad

transparente y sin tapujos la hizo

conectar de manera inmediata con los

televidentes.

La participación de Yolanda fue tan

destacada que logró alcanzar el segundo

lugar en el formato y aunque no ganó,

muchos reconocieron que su desempeño fue

extraordinario y coincidieron en que

merecía haberse llevado el primer lugar.

Tengo una amiga que le gusta la

pachanga, se pone hasta las chanclas, no

deja de bailar después de dos copitas le

gusta que la ves en que la agarran

detrás.

El programa Mou nació en 2006 como una

evolución natural de las hijas de la

madre tierra.

Cansadas de la constante demanda de

viajes que implicaba su antiguo show y

buscando un formato que les permitiera

quedarse en México, la dupla decidió

lanzar un programa de entrevistas y

variedades desde un foro de televisión.

El show rápidamente se convirtió en uno

de los programas más vistos y queridos

de Unicable. Su fórmula era simple, pero

efectiva. Dos amigas sentadas en un

sillón compartiendo anécdotas, haciendo

bromas y conversando con sus invitados

de una manera tan natural. una vaca.

No, fíjate,

no, no se siente bien chistoso. Yo

teñado otras cosas, pero vacas

Mo es de Monzrat, Joe es de Yolanda. Mo

Joe es ese ingrediente extra que todos

tenemos que nos hace atractivos a los

demás.

Mira, yo no se rata.

Más adelante, en 2007, a Yolanda se le

presenta una nueva oportunidad dentro de

la conducción con la llegada del formato

Netas Divinas. Este programa fue

concebido por Marta Figueroa, quien no

solo tuvo la idea original, sino que

también reunió al grupo de mujeres que

quería ver en la mesa, Gloria Calzada,

Isabel Ascurain, Yolanda Andrade y ella

misma. Al principio a Marta le costó

convencer a Yolanda de integrarse al

proyecto, ya que la idea de exponer su

vida privada en un programa no le

llamaba la atención.

Sin embargo, terminó aceptando cuando

Marta le explicó que necesitaba una

figura como ella, alguien que a través

de sus anécdotas aportara un punto de

vista desenfadado, jocoso y libre. Su

espontaneidad y forma directa eran justo

el toque diferente que el programa

necesitaba.

Curiosamente, un año después, Marta

Figueroa fue retirada del programa. En

su lugar se incorporó Luz María Cetina,

dando inicio a una nueva etapa para

netas divinas.

Unos años más adelante, de forma

repentina y sin previo aviso al

televidente, la imagen de Yolanda fue

sacada del programa.

En su momento se desconocieron los

motivos y no se dieron mayores

explicaciones.

Experiencia en este programa este

enriqueció mi corazón, mi alma vi todo.

Sé que aparte de un trabajo tengo

amigas, las quiero, o sea, gracias por

ser mis amigas y la amistad se agradece

y es eterna y y las quiero mucho.

Fue un hecho que dejó a la audiencia con

muchas preguntas sobre lo ocurrido. Con

el tiempo, la verdad terminó saliendo a

la luz. Durante un reencuentro de las

netas divinas en el que no estuvo

presente Luz María, Yolanda se sinceró y

contó a sus compañeras la versión

oficial que le dieron sobre su despido.

Oh, fíjate que me corrieron así muy

amablemente. Creo que hubo un

malentendido que porque yo le había

tirado la onda a Luzma en su camerino

que me había metido y la quería violar.

Entonces y Lu se quejó, te lo juro que

eso fue. Luzma se quejó y fue de que no

sabían cómo decirme de, “Oye, Jobe, pues

es que le estás tirando acoso mi tú a tu

compañera.” Le digo, “Gey, yo no me

acuerdo.” Aparte yo quiero mucho a

Luzma, pero ni al caso, no es mi línea.

Y

yo nunca vi nada incómodo ni

inapropiado. Eh,

y quiero pedirle, o sea, de verdad, yo

quiero disculparme con ella si acaso

malinterpretó algún detalle de mi parte.

En otra ocasión, ya con Luz María

presente, Yolanda tuvo la oportunidad de

hablar directamente con ella sobre el

incidente.

Pero cuando te despediste de las netas,

yo te lloré como viuda.

Sí, yo sentí que me lloraste porque te

sentiste culpable de que sabías la

verdad, de que me habían corrido por tu

culpa.

¿Qué hice? Ajá. ¿Qué hice? Que ella no

me dijo como para que fuera a la

dirección. Ay, ay, señor director. Ay,

maestro. Fíjense que yo no sé qué.

Entonces dije, qué poca madre de esta

vieja. No me acuerdo de No me acuerdo de

haber armado tal Pancho.

Pues me corrieron como

Javier que me con la lágrima.

Pero es la primera vez que yo estoy

oyendo esto, ¿eh?

Bueno, a mí me corrieron por tu culpa.

A ver, están tontas todas que no nadie

me dijo nada.

Pero, ¿cómo tú no lo sabías? Si eras la

esposa que mandó despedir a la señora.

Años después de su reincorporación, su

batalla con el alcoholismo se convirtió

en el verdadero motivo de una segunda

salida. La etapa de netas divinas y Mo

coincidió con el punto más ágido de su

adicción. Yolanda ha confesado que bebía

a diario y que su consumo afectaba su

desempeño, llegando a presentarse a las

grabaciones bajo los efectos del

alcohol.

Ante el reconocer que tú tienes una

enfermedad cuando ya estás en la peda y

de pronto la sigues A mí me lo

dijeron dos, tres personas, es más,

ustedes me vieron. O sea, ya no nos

daban vino tinto en el programa porque

yo me tomaba el de todas las netas

divinas.

Así es.

Y era así de que tenemos un problema

porque el llamado era a las 7:30 de la

mañana y Joe ya se había tomado la

botella. Pues ay, por favor. O sea,

¿cómo la sufrimos? Joe, ¿cómo la suf?

Una botella son cuatro copas. Yo decía,

“¿Qué? O sea, cuatro copas no es nada.”

Y ella así sufriendo conmigo y yo pues

hasta mi madre santa.

Monserrat declaró que trabajar con

Yolanda resultó ser muy complicado, pues

su ebriedad generaba un mal carácter en

ella, lo que alteraba la dinámica del

set y le causaba frustración.

A pesar de ello, siempre intentó

apoyarla y ayudarla en más de una

ocasión. Ese estilo de vida terminó

siendo uno de los principales detonantes

de la ruptura de su relación como

pareja, ya que la forma de vivir de

Yolanda era muy distinta a la de

Montserrat.

Entonces yo decía, “Puta, ¿cómo cuido

esta vieja que no se deja cuidar y no

quiere cuidarse de nada hasta que por

fin ya se cuidó?”

Estos difíciles episodios marcaron un

punto de inflexión para Yolanda, quien

tomó la valiente decisión de buscar

ayuda profesional.

Yo tuve un pleito con mi papá y yo le

dije a mi papá que mi papá y yo éramos

grandes amigos. muy muy amigos. Y yo le

dije a mi papá enojada,

“Ojalá que te mueras.” El día siguiente

me habló mi hermano y me dijo, “Mi papá

se murió de un infarto fulminal.”

Entonces sentí mucha culpa y lo único

que me hacía sentir bien era tomar. Me

sentía culpable, culpable, y no me

perdonaba como las últimas palabras que

yo le dije al al hombre que yo amaba

más, eh, fueron esas.

O sea, yo no solo era alcohólica, o sea,

yo me puse una pistola en la boca y le

jalé para darme un tiro en la y volarme

la cabeza. Y llegó un punto mi depresión

y mi culpa que

yo me tomaba dos botellas al día. Desde

entonces se ha mantenido sobria y vive

su recuperación como un logro diario.

Hizo un pacto consigo misma para no

volver a dañarse y hoy comparte su

experiencia en conferencias y charlas

apoyando a otras personas que atraviesan

una situación similar. En 2016, Yolanda

Andrade comenzó una relación sentimental

con la cantante Melisa Galindo,

exconcursante del programa La Voz

México.

Ambas se conocieron en un evento en

Culiacán relacionado con Julio César

Chávez, quien es tío de Melisa y gran

amigo de Yolanda.

Desde el primer momento, Yolanda quedó

cautivada por la belleza de Melissa y no

dudó en acercarse a ella. Lo que comenzó

como una amistad pronto se convirtió en

un apasionado romance. Entonces, bien

padre, porque así yo estaba bien

nerviosa, entonces yo le escribía, le

veía en línea, decía, “¿Por qué no me

contesta?”

Y ya. Entonces después le decía

a mi amiga, “Oye, ¿y qué le pongo?” “Y

qué no sé qué y tal y tal.” Y aparte yo

bien así bien teta,

pues así se pone uno. Dije, “De verdad,

no te vas a enamorar de mí.”

y no hizo caso.

Yolanda se mostraba muy entusiasmada con

esta relación y no tardó en compartir su

felicidad subiendo fotos de sus viajes y

momentos juntas en redes sociales. En un

intento por impulsar la carrera de

Melissa, la llevó a sus programas como

Moyo e Inetas Divinas para que cantara y

también gestionó su participación en

otros proyectos de Televisa.

Sin embargo, la relación no duró más de

un año y se comentó que gran parte de

esta ruptura se había desencadenado por

una infidelidad de Melisa con Luis

Caballero, el potro, lo que añadió más

polémica a la ya mediática separación.

Y en el 2019 se desencadenó un gran

escándalo que la puso en el centro del

debate público y mediático que marcó un

punto de quiebre en la vida de Verónica

Castro y Yolanda.

Todo comenzó cuando Yolanda Andrade fue

invitada al programa del conductor Jorge

Posa. Durante la entrevista, Posa le

preguntó directamente sobre su vida

amorosa y su relación con una famosa del

medio.

¿Te casaste en Amsterdam con Verónica

Castro?

Me casé en Amsterdam con una mujer

maravillosa

y que tú conoces perfectamente bien,

con Verónica Castro

y que admiramos.

Con Verónica Castro te casaste. Fíjate

qué curioso, si yo digo una mujer

hermosamente y hermosa y querida por

todo México,

¿qué alago que rápidamente digan

Verónica Castro? No,

bueno, yo es que

de verdad quieres seguirle rascando

porque si le rascamos este

en el nombre de nuestra amistad, quiero

que Verónica Castro me desmienta.

Verónica, a través de una llamada

telefónica a algunos medios, negó

rotundamente todo lo que Yolanda había

dicho. Yo creo que es una broma, como

las que hace siempre Yolanda.

Obviamente, pues es una broma.

Ajá. Es una boda de broma, es un momento

de broma, es todo lo que hace ella y

hacía sobre todo cuando estaba en un

momento que no estaba a lo mejor también

en sus cinco sentidos. Y bueno, yo lo

entiendo.

Mira, yo creo que ya es una falta de

respeto después de tantos años, Martí.

Yo de veras, yo quiero mucho a Yolanda y

la quise, la quise mucho, ya no la

quiero.

Yo no estoy vendiendo mi vida, a mí me

interesa venderla.

Yo no no me casé, no soy su mujer, no

soy su esposa.

Esta respuesta provocó la molestia de la

conductora, quien aseguró que podía

hacer cualquier cosa menos mentirosa.

Verónica debe de tranquilizarse porque

porque la verdad

la tengo yo, la tengo yo en video, la

tengo yo en fotos, la tengo yo en mi

alma, la tengo en mi corazón, la tengo

en mi cabeza. Yo no quiero ofenderla. No

hicimos nada mal.

La guerra de declaraciones entre ambas

acaparó todos los titulares y dividió a

la opinión pública. Mientras algunos

apoyaban la versión de Yolanda, otros

defendían a Verónica acusando a Andrade

de intentar colgarse de la fama de la

primera actriz.

Este escándalo tuvo graves consecuencias

para ambas.

Para Yolanda significó un intenso

escrutinio mediático y la crítica de una

parte del público. Para Verónica Castro

fue un golpe devastador.

La actriz, que ya se había retirado

parcialmente de la actuación, decidió

alejarse por completo del mundo público,

alegando que ya no quería ser parte de

ese tipo de polémicas. La gran amistad

que existía entre las dos se rompió por

completo. Y fue precisamente esta

confesión de Yolanda la que reveló los

verdaderos motivos de su ruptura con

Montserrat años atrás. Cuando tronamos

fue muy difícil y fue mi culpa

porque la engañé con otra y fue bien

cabrón porque mira, el otro día me

encontré una carta, carta que nunca leí

hasta hace poco y la carta decía, “No me

importa que tú tengas esas emociones con

ese personaje, con esa persona, con

Verónica, pero yo te quiero decir que

tal y tal y te perdono, pero no quiero

perder por

esa inquietud que estás viviendo.”

Eso te lo escribió Monce. Me lo escribió

a Monserrate

y yo no leí la carta hasta hace poco,

pero la digo.

En el 2023 su salud entró a generar

grandes problemas en ella.

Todo comenzó a principios de año, cuando

la conductora empezó a experimentar

síntomas muy alarmantes que la obligaron

a ausentarse de su programa

continuamente.

Apenas ayer me dijeron que no era un

tumor. Yo yo empecé con un vómito y y y

diarrea y después acabé con una cosa en

la cabeza. Estoy cansada.

Ya le ya estoy cansada, de verdad. Y

mira, tengo un problema enlojo que que

no se me ha quitado por la neuburisma

que tengo acá. Sí, sabes,

aunque ha recurrido a la medicina

tradicional para tratar el aneurisma,

también ha buscado ayuda espiritual y ha

expresado que está convencida de que su

enfermedad tiene un origen más allá de

lo médico.

Gran susto el que se llevó la producción

de Mou, pues después de una larga

jornada de trabajo, Yolanda Andrade tuvo

una crisis de salud, por lo que se vio

imposibilitada para atender a los medios

de comunicación.

No te preocupes, me siento un pocoada.

Ve a tu casita. Ve a tu casita. Un día.

Tranquila. Desde ese momento, Yolanda ha

enfrentado un duro proceso de

recuperación que la ha mantenido alejada

de las grabaciones de su programa y de

la vida pública. Y en su entrevista más

reciente con los medios, dejó a todos

preocupados al compartir su diagnóstico

médico, el cual no fue nada alentador.

Tengo dos diagnósticos y los dos

diagnósticos que tengo no tienen cura.

Entonces, conclusión es que quiere decir

médicamente, científicamente que me

puedo morir antes que ustedes. Pero pues

eso lo decide Dios.

¿Te puedes saber cuál es este? tengo una

enfermedad degenerativa

y poco a poco, bueno, los doctores me

han ayudado mucho, pero poco a poco pues

no voy a poder caminar, no voy a poder

hablar y etcétera, etcétera. Aunque

actualmente no se encuentre en el mismo

estado en el que siempre se ha mostrado

debido a su salud, la gente continúa

aplaudiendo su carácter crítico, su

autenticidad y su cercanía con el

público. Durante años ha aportado

entretenimiento y alegría. Y sin duda

así es como queremos seguir viéndola en

los medios.

No hay pena ni duda, ni felicidad que

sea eterna. Todo pasa en esta vida.

Belleza, juventud, la vida misma.

Esa soy yo.